Guía Tácticas y Formaciones Personalizadas... Fifa 19

La formación que uses debe adaptarse tanto a tus gustos y estilo de juego como a las características de los jugadores que tienes en tu plantilla. Forzar una formación sin tener en cuenta las características de tus jugadores será un error.
Intenta manejar y conocer distintas formaciones, no te limites sólo a una, para que si debes cambiar durante un partido no sea un problema. Igualmente trata de tener más de una ‘táctica personalizada’ controlada.
El primer paso para lograr una victoria pasa por reconocer el estilo de juego y formación de rival. No cambies de inicio tu formación únicamente por el contrario. Ten paciencia y espera a que el paso de los minutos determine quién ha impuesto su pizarra. A partir de ahí recuerda, hay ocasiones en las que adaptarte a tu rival es el primer paso para el éxito.
Si tu rival te ha ganado claramente la partida desde la formación, cambia el dibujo. Busca un golpe de efecto. No insistas en lo que no funciona.

Puedes consultar aquí ‘Archivo Tácticas y Formaciones… FIFA’

Ten en cuenta las ‘Instrucciones de jugador’ cuando quieras desarrollar hasta el último detalle tus formaciones, dado que los movimientos que apliques a tus jugadores determinaran el funcionamiento de tus tácticas personalizadas y tus formaciones. Igualmente ten muy presente los ‘Atributos de jugador‘ para conocer si lo que le pides y exiges a tus jugadores, pueden hacerlo por sus características particulares.

Podría decirse que es la 3-1-4-2 es una de las tácticas menos frecuentes entre los jugadores de Fifa 19 y, sin embargo, aunque pueda parecer lo contrario, puede funcionar especialmente bien entre quienes disfruta de juego de posesión, toque y desmarque. Y todo ello gracias a una formación que te permite disponer de 5 jugadores en el centro del campo. Una reversión de la 3-5-2, que renuncia a un MCD y el MCO para disponer de dos MC.

La 3-1-4-2 está formada una defensa de tres (DFC-DFC-DFC) y un centro del campo que arranca desde un MCD por delante de la defensa y junto a él la pareja MC-MC. A los costados, en banda, los MD-MI, mientras que en la delantera la pareja DC-DC. La presencia de cinco centrocampistas nos lleva a un juego de posesión

Es la parcela de tres cuartos -imagen 1- del campo donde la 3-1-4-2 puede y debe sacar su mayor rendimiento gracias a los centrocampistas disponibles. Los MC-MC junto al MCD deben generar un triángulo de juego desde el que generar la jugada. No hay prisa. Toque, desmarque y paso hacia adelante. Avance constante. ¿Y quién debe avanzar? Todo no. La lógica natural nos lleva a entender que es el MCD –imagen 2– el jugador que debe quedar como ancla mientras avanza la jugada en los pies de los MC-MC y los MI-MD por banda. A medida que se avanza se pueden sumar los dos DC. Se puede buscar una segunda opción. En este caso los MC-MC serán los encargados de generar el juego pero siempre sin perder la posición, siendo el MCD un ‘box to box’ que se adelante –imagen 3– por el centro del campo aprovechando su fuerza, físico y resistencia. Una posibilidad aunque menos natural que la anterior.

Instrucciones de Jugador, tipos de jugador y Táctica Personalizada

En este caso te ofrecemos una táctica para una 3-1-4-2 enfocada a la posesión, juego en corto, dominio de la pelota y mucho juego colectivo. En defensa, presión alta con riesgo a la espalda de los centrales. Mucho juego por dentro con la posibilidad de dar continudad por fuera.

Tres centrales. Quedarse Atrás / Intercepciones normales. Los dos más veloces, en los laterales. Es conveniente que los dos centrales que forman en los extremos superen al menos los 68 de velocidad.
MCD. Sus instrucciones de juego pasarán primordialmente por Defensa equilibrada, Quedarse atrás al atacar (no queremos que en ataque pierda la posición), Intercepciones normales y Marcaje del centro. No es esencial que el MCD destaque en lo físico gracias a la presencia de dos MC que darán solidez a las tareas defensivas.
En bandas los MI y MD. Necesariamente jugadores con ritmo de juego Alto/Alto para ayudar en defensa y ataque por igual. La banda es del toda para ellos. En sus instrucciones de juego destacan Quedarse en banda (queremos que den amplitud al juego), Bajar a defender, Esperar rechace, Intercepciones normales y Desmarcarse. Aunque jugamos buscando la posesión, la opción ‘desmarcarse’ nos ofrece una salida vertical de balón, en ocasiones muy útil para dar salida al juego. Puedes optar por Jugar en corto como apoyo mucho más cercano pero puede ser contraproducente a la hora de sacar el balón. Tú mismo te reduces los espacios.
MC-MC. Sin MCO y con un único MCD, los MC serán el motor en ataque y los apoyos en cobertura en defensa. Su nivel de trabajo, al menos, debe ser Medio/Medio. En sus instrucciones elegimos Ataque equilibrado, Esperar rechace, Intercepciones normales, , Conservar la posicion y Marcaje de las bandas. Podemos elegir Libertad de movimientos. Ganamos movilidad de nuestros MC pero perdemos posicionamiento de nuestros MC en el centro del campo a la hora de combinar.
DC-DC. Sus instrucciones, Quedarse en el centro y Desmarcarse. Con estas dos opciones buscamos que jueguen por la parcela central, donde no tenemos MCO, y al desmarque, aprovechando pases al hueco. Podemos elegir Abrirse a las bandas buscando más movilidad aunque podemos molestarnos con el MD-MI.

Aunque nuestro objetivo es una presión fuerte, de inicio vamos a escoger un estilo defensivo Equilibrado. El motivo, no queremos que el equipo pierda la organización y el equilibrio. A partir de ahí, Anchura 8 de 10 para que nuestros centrales estén cerca de las bandas y Profundidad 8 de 10, buscando una presión alta.

Se trata de una táctica que tiene como riesgo los balones en largo a la espalda de los centrales.

Es la 3-1-4-2 una táctica para tener la posesión. Por ello optaremos por un estilo ofensivo Posesión que nos permita manejar el balón en pases cortos.

Con jugadores de banda -MI y MD- apostaremos por un equipo ancho –Anchura 7 u 8 de 10– para tener a los jugadores abiertos. Sin embargo,y pese a la presencia de dos DC, no buscaremos los centros al área –Jugadores en Área 4 de 10– sino atacar en jugadas con pase al hueco y desmarque.

En Córners 3 de 5 y Faltas 3 de 5.

Arriesgada en defensa, versátil en la zona de construcción y vertical en ataque, la formación 3-4-3 se presenta como la evolución ofensiva del 4-3-3 de la escuela holandesa, aquella que comenzó a gestarse con el Ajax de Rinus Michels y que pasó a la historia con la Holanda del 74. Fueron los años de la Naranja Mecánica, del fútbol total, un concepto que parte de que ningún futbolista tiene un papel fijo sobre el césped, lo que exige una gran capacidad técnica y táctica propia pero genera en el rival una enorme complicación en la fijación de las marcas. Una idea que llegó a España de la mano de Johan Cruyff, que ya en el Barcelona empezó a experimentar con un 3-4-3 gracias a la presencia de un jugador como Koeman y que quiso llevar a límite Guardiola que, tras su exitosa apuesta por el 4-3-3, acabó su etapa azulgrana con un 3-4-3 empujado por una plantilla prolija en centrocampista pero limitada en defensas.

Son muy pocos los equipos que hacen uso de esta formación y, algunos que dicen usarla, realmente lo hacen desde una 5-2-3 donde en lugar de centrocampistas (MD-MI) hacen uso de carrileros que permiten, precisamente, que en faceta ofensiva se sumen al ataque, dando la sensación de una 3-4-3.

Sin laterales que apoyen, la defensa de la 3-4-3 se asienta sobre tres centrales, obligados a jugar con espacios tanto a sus espaldas como en las bandas. Y son los carriles el espacio para el MD y el MI, responsables de lo que ocurra junto a la cal. Ayudarán en defensa, ejercerán de centradores en el ataque, pero siempre como apoyo en corto a los dos mediocentros. Doble pivote (MC-MC, MCD-MCD, MC-MCD) como caudal de juego desde la medular hacia las posiciones de ataque, área de influencia de los dos extremos (ED y EI) y el delantero centro (DC). Los dos primeros, libertad absoluta en su búsqueda del área. Diagonal, regate y disparo. En el área, un delantero centro referencia y rematador.

Tomando como punto de partida la clásica 3-4-3 podemos desarrollar la 3-4-3 en rombo, eliminando un centrocampista y dando entrada a un MCO en el vértice del rombo; la 3-4-2-1, en la que cambiamos los extremos por segundos delanteros (SDD-SDI); la 3-1-4-2, en la que eliminamos las posiciones de extremos, incorporamos un MCD tras la línea de cuatro en el centro del campo y sumamos en el ataque dos delanteros; la 3-4-1-2, en la que eliminamos los extremos, incorporamos un MCO y dos delanteros por delante; la 3-5-2, versión defensiva de la 3-4-1-2, pues el doble pivote lo forman dos MCD; o la 3-5-1-1, en la que acompañamos al delantero con un SD a sus espaldas, formando en la medular con 5 jugadores.

Es una de las elecciones que debes tomar cuando construyes tu 3-4-3. ¿Qué dobe pivote quieres? No sólo debes preguntarte si quieres centrocampistas físicos o técnicos, sino si quieres organizar tu medular en torno a las combinaciones MCD-MCD, MC-MC o MC-MCD.

En El Rincón de Chava te aconsejamos como punto de partida buscar el equilibrio. Es decir, elegir un MCD físico y un MC técnico. El primero será el que lleve el peso físico y defensivo del equipo -capacidad de trabajo Alta/Alta-, la iniciativa en la presión y la ocupación de espacios primando atributos como la Resistencia, Fuerza, Agresividad, Anticipación e Intercepciones. El segundo, un MC más técnico, será el responsable de dar orden y sentido al inicio de la jugada. Hablamos de un jugador en el que predominen atributos como el Pase Corto, Pase Largo o Visión. Eso sí, sin perder de vista nunca los valores defensivos.

Ejemplo de centro del campo con dos jugadores físicos y potentes como Kondogbia o Thomas Partey en Fifa 19

Nos gusta en El Rincón de Chava construir nuestro doble pivote en la 3-4-3 con dos jugadores físicos y potentes. Esta decisión, acertada en muchos casos, te puede llevar a perder capacidad en la construcción, pero te llevará a ganar solidez en el centro del campo. Si optas por esta opción deberás tenerlo en cuenta a la hora de realizar su táctica personalizada, marcada por el físico en defensa y la falta de un jugador creativo en ataque.

Es interesante sacarle el máximo provecho posible a la faceta ofensva de la 3-4-3, teniendo en cuenta que es una formación construida para atacar.

Como ya hemos explicados anteriormente, la pareja de centrocampistas determinará nuestro juego ofensivo, más en corto y de posesión en el caso de contar con jugadores técnicos, o más directo y volcados a banda en el caso de optar por centrocampistas ofensivos. Inicio de juego por el centro y descarga a banda –imagen 1– donde serán los MD-MI los responsables de llevar el balón a posiciones de centro al área. Sin MCO las opciones de filtar pase al hueco desde la frontal a posiciones de remate se reducen.

Los extremos –imagen 2– se suman al área con el DC. Libertad de movimientos y espacios libres hasta la línea de fondo para el MD-MI. Diagonales, disparo desde la frontal y combinaciones con el DC, referente en el área. Los tres, disponibles para el remate y el rechace.

Por último, un consejo. Acaba las jugadas y evita perdidas en el centro del campo. Con una defensa de tres puede ser muy peligrosa cualquier pérdida. Para minimizar este riesgo una opción es elegir un estilo defensivo de Presión Tras Pérdida.

Instrucciones de Jugador, tipos de jugador y Táctica Personalizada

Tres centrales. Los dos más veloces en los costados. Ayudará que los dos centrales que forman en los extremos superen al menos los 65-70 de velocidad. El más potente de cabeza, en el centro. Si sólo tenemos un central ‘rápido’ lo colocaremos en el centro.
MC-MC, MCD-MCD o MC-MCD. Doble pivote, obligados a construir y destruir por igual, aunque bien es cierto que cada uno debería ser más protagonista que el otro en cada uno de los aspectos. No obstante sus instrucciones de juego pasarán en cualquier caso por Conservar la posición y Quedarse atrás al atacar. Deben dar el equilibrio del equipo. Si apuestas por dos MCD físicos y potentes es evidente que te ayudarán mucho más a las funciones defensivas y la presión intensa. Si apuestas por dos MC más creativos, ganas a la hora de construir. Te aconsejamos que optes por un MCD físico y defensivo -Resistencia, Intercepciones, Robo de balón o Entrada Agresiva- y un MC más táctico -Pase Corto, Pase Largo, Visión, Agilidad- y creativo.
MI – MD. Jugadores con ritmo de juego Alto/Alto para ayudar en el repliegue y el ataque por igual. La banda es toda para ellos. En sus instrucciones de juego destaca Quedarse en banda pues queremos que su juego sea pegado a la cal. Optaremos por un Apoyo defensivo básico. Podemos elegir Bajar a Defender pero retrasarán en exceso su posición y puede convertirse en una dificultad a la hora de sacar el balón. Demasiados metros por recorrer. Nos gusta elegir Jugar en corto para que sean un apoyo más cercano al doble pivote. Atentos a jugadores con conceptos como Centros, Efecto, Pases Cortos o Resistencia.
ED-EI. Dado que las bandas son para los MD-MI, buscaremos que los extremos pisen el área. Por ello optaremos por instrucciones de jugador como Diagonales, Desmarcarse o Remate y Rechace. Es cierto que los extremos suelen destacar por su velocidad, pero en este caso buscamos conceptos más específicos de ataque, por lo que apostaremos por valores relacionados con los atributos de Tiros.
DC. Sus instrucciones, Referencia y Quedarse en el Centro. Su función, ser el clásico ‘9’ de área. Atentos a conceptos como Definición, Precisión de Cabeza, Equilibrio, Salto o Agresividad.

Vamos a apostar un estilo defensivo Presión tras pérdida de posesión. El objetivo que perseguimos con ello es que si el equipo pierde la pelota en zona de ataque nuestros jugadores presionen durante 7 segundos al rival en busca de una recuperación rápida. Como contrapartida, cansancio en los jugadores y pérdida de la posición. Si te resulta demasiado arriesgado o incómodo, opta por una Presión Fuerte buscando que la defensa comience en campo rival, presionando a los rivales ante un control largo, pase difícil o balón suelto. Para que ambos estilos puedan tener éxito necesitamos que el equipo tenga presencia en campo rival –Profundidad 8 de 10– . Sin laterales, obligado que los centrales caigan a hacer coberturas en banda, con Anchura 8 de 10.

Se trata de una táctica que tiene como riesgo los balones en largo a la espalda de los centrales. Puedes buscar algo más conservador con un estilo defensivo Equilibrado y reducir la Profundidad del equipo.

Es la 3-4-3 una táctica para tener la posesión, mascar la jugada paso a paso. Por ello el estilo ofensivo será Posesión, buscando los jugadores los apoyos en corto. Sin un MCO que haga de enganche, esta táctica nos permitirá avanzar poco a poco con el equipo hacia posiciones de ataque. Si no nos sentimos cómodos o nuestro centro del campo lo forman jugadores más físicos que técnicos modifica el planteamiento a estilo ofensivo Equilibrado alternando toque en corto y el desplazamiento en largo hacia ED-EI-DC.

Con jugadores de banda -MI y MD- y extremos, debemos aprovechar la anchura del equipo en ataque –Anchura 8 de 10– para atacar muy pegados a la banda. Relacionado con ello, la diagonales de los extremos y un DC referente en el área nos permitirá apostar por los centros al área –Jugadores en el área 7 u 8 de 10– con los MD-MI como protagonistas.

En Córners 3 de 5 y Faltas 3 de 5.

No es la 3-4-3 En Rombo una formación habitual como punto de partida en un partido sino una variante secundaria de la 3-4-3 En Línea. Y se trata de una variante muy ofensiva en la que se rompe la pareja de centrocampistas en el centro de campo para formar en rombo. De MC a MCO, cerca de los delanteros y de las posiciones de ataque.

Como el propio nombre indica, la 3-4-3 En Rombo consiste en la organización del centro del campo en base a un rombo con un MCD y un MCO como ejes. El equipo gana un enganche directo con la zona de ataque, pegada desde segunda línea y la oportunidad del último pase al DC; pero pierde equilibrio en la medular, coberturas en defensa y contundencia en el centro del campo.

Como en otras formaciones de 3 centrales (DFC) y sin carrileros, situaremos los dos más rápidos en los costados. El centro del campo descansará en este caso sobre un único MCD que en este caso deberá ser apoyado en defensa por los dos jugadores de banda (MD-MI) debido a la pérdida de uno de los dos centrocampistas defensivos. Por delante un mediocentro ofensivo (MCO) que, siendo enganche, llegará desde segunda línea hacia posiciones de ataque, donde encontramos a los dos extremos (ED-EI) y al delantero centro (DC).

En ataque, la salida de balón –imagen 1– la encontraremos a través del MCO y los MD-MI. La banda será de estos últimos, tanto en defensa como ataque. En el plano defensivo ayudarán en el repliegue a los centrales, en el plano ofensivo terminará ocupando las posiciones del extremo. Inicio de jugada en pase corto, avance progresivo y oportunidad final de centro al área.

Ello será posible gracias –imagen 2– a la labor de los extremos. Diagonales al área, búsqueda del gol, espacios libres para los MD y MI. Queremos extremos que encaren y busquen portería. La banda es su punto de partida en ataque pero la abandonan en la finalización.

El MCO –imagen 1– tendrá la libertad absoluta de movimiento para ocupar todos los espacios. El objetivo, ser caudal del juego. Apoyo en el pase corto o canalizador del pase en largo. Cerca del área, pase filtrado o disparo desde la frontal. Eso ya depende de tí.

Se asienta buena parte del peso defensivo del equipo en el único MCD. Partiendo de la presencia de un MCO, de un elevado número de jugadores defensivos y de la ausencia de laterales, en la 3-4-3 en rombo recomendamos un MCD cuyos rasgos destacados estén en el plano defensivo. Es la escoba del equipo. Hablamos de conceptos como la Anticipacion, Intercepciones, Robo de Balón o Agresividad. Hablamos de un MCD que te cubra las espaldas. Su Resistencia te permitirá que su labor sea más eficaz los 90 minutos de partido. Acompañarlo de rasgos o habilidades como pueden táctico, creador de juego, pases largos, entradas o liderazgo te permitiráademás hacer de tu MCD el primer constructor de la jugada.

Si apostamos por la 3-4-3 en rombo es porque queremos tener en el campo un MCO y darle protagonismo. Como en otras formaciones en rombo (la 4-1-2-1-2) el MCO deberá ejercer como pieza clave en el entramado del juego. Complemento al DC llegando desde posiciones de falso ‘9’, surtidor de pases hacia el tridente de ataque -DC, ED y EI- o finalizador desde la frontal, hay un amplio abanico de opciones en las que el MCO puede actuar.

Si el MCD es el responsable del primer pase, el MCO es el responsable del resto. Salida del balón, juego en corto con los MD-MI y asistencia última a las diagonales de los extremos o posiciones de delantero centro. Hablamos en este caso de una función más creadora. Busca jugadores con niveles altos en características como visión, pases cortos o pases largos. Ayudarán también Rasgos o Habilidades Especiales como Creador de Juego, Centrocampista o Pases Largos. Ten en cuenta tu tipo de ’10’ a la hora de elegir tu tipo de juego al elaborar tu táctica personalizada.

No obstante su posición de llegada en ataque al balcón del área le convierte en una opción de finalización desde la frontal o desde el propio área. Pared en corto, carrera al hueco y oportunidad de disparo.

Instrucciones de Jugador y Táctica Personalizada

Tres centrales. Los dos más veloces, en los costados. Ayudará que los dos centrales que forman en los extremos superen al menos los 65-70 de velocidad. El más potente de cabeza, en el centro.
MCD. Un ‘5’ destructor. Sus instrucciones de juego pasarán especialmente por Conservar la posición, Quedarse atrás al atacar. Es el único ancla del equipo. A la hora de buscar un jugador priorizamos conceptos como la Resistencia, Intercepciones, Robo de balón o Entrada Agresiva, conceptos defensivos.
MCO. Es el constructor de juego. Sus instrucciones de juego serán Remate y Rechace, dado que nos interesa que aporte tanto dentro como fuera del área, Libertad de Movimientos y Bajar a Defender, para que en defensa podamos situar al equipo como un 3-4-3. Como apostamos por un MCO creador, priorizamos conceptos como el Pase Corto, Visión, Agilidad e incluso Posicionamiento por delante de otros como Velocidad o Aceleración.
MI – MD. Jugadores con ritmo de juego Alto/Alto para ayudar en el repliegue y el ataque por igual. La banda es toda para ellos. En sus instrucciones de juego destacan Quedarse en banda pues queremos que su juego sea pegado a la cal. Optaremos por un Apoyo defensivo básico. Podemos elegir Bajar a Defender pero retrasarán en exceso su posición. Puede elegirse Jugar en corto como apoyo mucho más cercano al MCD y MCO. Atento a jugadores con conceptos como Centros, Efecto, Pases Cortos o Resistencia.
Todo el frente de ataque es la parcela del MCO. Libertad de movimientos para un jugador responsable de dar goles pero también generarlos. Puedes apostar por un MCO con unas estadísticas altas en todo lo relacionado con el pase, o por un MCO más goleador y con números altos en el regate, disparo o definición. En su obligación Bajar a defender.
ED-EI. Dado que las bandas son de los MD-MI, buscaremos que los extremos pisen el área. Por ello optaremos por instrucciones de jugador como Diagonales, Desmarcarse o Remate y Rechace. Es cierto que los extremos suelen destacar por su velocidad, pero en este caso buscamos un concepto más atacante, por lo que apostaremos por valores relacionados con los Tiros.
DC. Sus intrucciones, Referencia y Quedarse en el Centro. Su función, ser el clásico ‘9’ de área. Atento a conceptos como Definición, Precisión de Cabeza, Salto o Agresividad.

Vamos a apostar una estlo defensivo marcado por una Presion Fuerte (el equipo presiona cuando a los rivales se les va un control largo, tienen que controlar un pase difícil o el balón queda suelto) que irá secundado por un equipo con presencia en campo rival –Profundidad 8 u 9 de 10– y para controlar el riesgo del ataque por bandas, Anchura 8 de 10 para que nuestros centrales caigan en cobertura.

Se trata de una táctica que tiene como riesgo los balones en largo a la espalda de los centrales. Puedes buscar algo más conservador con un estilo defensivo Equilibrado y reducir la Profundidad.

Es la 3-4-3 una táctica para tener la posesión, pero la presencia de tres jugadores de caracter plenamente ofensivo -ED, EI y DC- no nos debe hacer despreciar el pase largo. Por ello optaremos por un estilo ofensivo Equilibrado que nos permita alternar el toque con el desplazamiento en largo y de banda a banda.

Con jugadores de banda -MI y MD- y extremos, apostaremos por un equipo ancho –Anchura 8 de 10– para atacar muy pegados a la banda. Relacionado con ello, la diagonales de los extremos y el DC referencia en el área, apostaremos por los centros al área –Jugadores en el área 7 u 8 de 10– a cargo de los MD-MI.

En Córners 3 de 5 y Faltas 3 de 5.elrincondechava.

Podemos considerar la 3-4-1-2 como la versión ofensiva de la 3-5-2. Se trata de una formación muy poco habitual tanto en el fútbol real como en FIFA19, donde muchs jugadores basan todo su juego en el sprint, la velocidad y el regate. Pese a todo ello, te invitamos a probarla si eres un jugador que te gusta jugar en posesión, con ritmo alto en el toque, usando las bandas como apoyos y que disfrutas creando fútbol desde el MCO, por el que deben pasar buena parte de las acciones del partido.

La 3-4-1-2 se diferencia básicamente de la 3-5-2 en que su centro del campo carece de MCD. Está formado por dos MC-MC. Aunque en muchas ocasiones supone una debilidad defensiva, debemos ser capaces de convertirlo en una virtud ofensiva. Por detrás de ellos tres DFC-DFC-DFC (los dos más rápidos deben formar en los laterales) y a sus costados los MD-MI. jugadores de banda y que no sólo serán los responsables de dar amplitud al juego sino de balancear el ataque y la defensa. Por delante un mediocentro ofensivo MCO enganche con los dos delanteros DC-DC.

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Instrucciones de Jugador, tipos de jugador y Táctica Personalizada

En este caso te ofrecemos una táctica para una 3-4-1-2 enfocada a la posesión, juego en corto, dominio de la pelota y mucho juego colectivo. En defensa, presión desde el centro del campo, con riesgo a la espalda de los centrales. Amplitud en bandas.

Tres centrales. Los dos más veloces, en los laterales. Consideramos un central ‘veloz’ a partir de los los dos 70 de velocidad.
Por delante de los centrales, los MC-MC. Sus instrucciones de juego basicamente pasarán por Quedarse atrás al atacar (no queremos que en ataque pierdan la posición), Esperar el rechace, Marcaje del centro e Intercepciones conservadoras, pues los MC no suelen ser jugadores de altos valores en atributos como entrada agresiva.
En bandas los MI y MD. Jugadores con capacidad de trabajo Alto/Alto de manera obligatoria para ayudar en el repliegue y el ataque por igual. La banda es del toda para ellos. En sus instrucciones de juego destacan Quedarse en banda (queremos que den amplitud al juego), Bajar a defender y Desmarcarse. Aunque jugamos buscando la posesión, la opción ‘desmarcarse’ nos ofrece una salida vertical de balón muy útil para dar salida a la jugada. Puedes optar por Jugar en corto como apoyo mucho más cercano pero puede ser contraproducente a la hora de sacar el balón. Tú mismo te reduces los espacios.
Todo el frente de ataque es la parcela del MCO. Libertad de movimientos. Bajar a defender (debe ayudar en defensa, teniendo en cuenta que contamos con dos MC-MC en el centro del campo) y Esperar el rechace.
DC-DC. Sus instrucciones, Vía de ataque equilibrada y Desmarcarse. Con estas dos opciones ganamos opciones en el estilo de ataque, ya sea posicional en el área como en el desmarque y el pase el hueco.

Escogemos un estilo defensivo Equilibrado. El motivo, no queremos que el equipo pierda la organización y el equilibrio, además de no contar con MCD en el equipo. A partir de ahí, Anchura 8 de 10, para que nuestros centrales estén cerca de las bandas -a los MC les hemos ordenado Marcaje del Centro, para que la parcela central no se desequilibre- y Profundidad 8 de 10 buscando que las líneas se aprieten en el centro del campo

Es la 3-4-1-2 una táctica para tener la posesión. Por ello optaremos por un estilo ofensivo Posesión que nos permita manejar el balón en pases cortos. Podemos variarla sin problemas a Equilibrada.

Con jugadores de banda -MI y MD- apostaremos por un equipo ancho –Anchura 8 de 10– para atacar muy pegados a la banda. Sin embargo, y pese a la presencia de dos DC, no buscaremos los centros al área –Jugadores en Área 4 de 10– sino atacar en jugadas con pase al hueco y desmarque.

En Córners 3 de 5 y Faltas 3 de 5.

Para los que gustan arriesgar en defensa y buscar la posesión como fórmula de ataque aparece el 3-5-2, una formación que permite jugar con una gran amplitud de campo gracias a sus MD-MI, compacta en el centro del campo por la presencia de 5 centrocampistas e ideal si te gusta dominar los partidos desde la posesión.

Es una formación dirigida a disfrutar de un juego elaborado, lento y en corto que facilite a la hora de atacar la progresiva incorporación de los interiores y los pivotes defensivos desde la defensa al ataque. No es recomendable para jugar a la contra.

Como contrapartida, su debilidad defensiva, especialmente ante formaciones con extremos.

Posiciones

Se trata de una formación que descansa sobre 3 centrales DFC -los dos más rápidos deben formar en los laterales- y dos centrocampistas defensivos MCD. Figuras esenciales son los MD-MI, jugadores de banda y que no sólo serán los responsables de dar amplitud al juego sino de balancear el ataque y la defensa. Por delante un mediocentro ofensivo MCO enganche con los dos delanteros DC.

La diferencia entre la 3-5-2 y la 3-4-1-2 es que la primera de ellas usa dos MCD. La 3-4-1-2 está formada por dos MC en el campo, por lo que resulta más ofensiva y en defensa asume más riesgos.

Una de las variantes que permite la 3-5-2 es una 3-5-1-1 donde suprimimos un DC y situamos sobre el campo un segundo delantero -SD- como enganche. El MCO se convierte además en MC.

Una formación definida por su amplitud

La 3-52 es una formación que se define de partida por la amplitud que le da los MD-MI. Tanto en defensa como en ataque. La ausencia de laterales obliga a los jugadores de banda a convertirse en ‘carrileros’. Presencia obligada en ataque y defensa junto a la cal. Debe ser una de sus virtudes. La amplitud, además del propio posicionamiento de los jugadores, la conseguiremos con el estilo de juego tanto ofensivo como defensivo, como después te explicamos en la táctica personalizada para esta formación. Queremos un equipo muy abierto a las bandas.

En la 3-5-2 es importante el trabajo Alto/Alto de los MD-MI,pero no es menos importante el tridente que forman los MCD-MCD-MCO tanto para la creación como para la construcción. Son la base de la estructura de la 3-5-2.

Es importante contar con dos MCD dominadores de conceptos defensivos como intercepciones, precisión de cabeza, marcaje, robos de balón o entrada agresiva. Indudablemente, atributo Alto en trabajo defensivo es imprescindible. Fijados los valores predominantes, puedes optar por un MCD más técnicos o más físicos. Los primeros te ayudarán a gestionar con mayor eficacia el dominio del balón, los segundos te ayudarán a gestionar el marcaje de los espacios, coberturas y repliegues en defensa.

En el caso de la 3-5-2 en El Rincón de Chava te aconsejamos elegir dos MCD físicos, ayudándote a llevar el peso físico del equipo, el repliegue -box to box-, la presión y la ocupación de espacios gracias a su mayor resistencia, fuerza, agresividad, aceleración y velocidad.

Si vas a optar por dos MC reconvertidos, entonces te aconsejamos que optes por la 3-4-1-2, donde el centro del campo parte de las posiciones MC-MC.

Y con la elección del doble pivote, la elección del MCO, eje del ataque. Asegurada su espalda con dos MCD, y por delante con dos DC, buscaremos un ’10’ protagonista como creador de oportunidades. Será el jugador que vaya dando sentido a la jugada paso a paso. Buscamos un creador, un pasador con alta capacidad en visión de juego, control de balón, agilidad, posicionamiento o pases cortos. Atributos como la velocidad o la aceleración serán secundarios.

Instrucciones de Jugador, tipos de jugador y Táctica Personalizada

En este caso te ofrecemos una táctica para una 3-5-2 enfocada a la posesión, juego en corto, dominio de la pelota y mucho juego colectivo. En defensa, presión alta, agresiva e intensa, con riesgo a la espalda de los centrales. Amplitud en ambos casos.

Tres centrales. Los dos más veloces, en los laterales. Ningún central puede sostener directamente la aceleración de jugadores Salah, Hazard, Sturridge, Mbappe… Pero sí aguantar la carrera hasta posiciones defensivas. Por ello es necesario que los dos centrales que forman en los extremos superen al menos los 65-70 de velocidad.
Por delante de los centrales, dos MCD. Sus instrucciones de juego pasarán especialmente por Quedarse atrás al atacar (no queremos que en ataque pierdan la posición), Marcaje del centro e Intercepciones agresivas (si queremos un equipo que presione en alta debe hacerlo con intensidad sus jugadores).
En bandas los MI y MD. Jugadores con ritmo de juego Alto/Alto para ayudar en el repliegue y el ataque por igual. La banda es del todo para ellos. En sus instrucciones de juego destacan Quedarse en banda (queremos que den amplitud al juego), Bajar a defender y Desmarcarse. Aunque jugamos buscando la posesión, la opción ‘desmarcarse’ nos ofrece una salida vertical de balón, en ocasiones muy útil para dar salida al juego. Puedes optar por Jugar en corto como apoyo mucho más cercano pero puede ser contraproducente a la hora de sacar el balón. Tú mismo te reduces los espacios.
Todo el frente de ataque es la parcela del MCO. Libertad de movimientos de manera innegociable. Bajar a defender (debe ayudar en defensa) y Esperar el rechace.
Arriba dos DC. Sus instrucciones, Referencia y Abrirse a las bandas. Con estas dos opciones permitimos abrir y generar espacios por el centro, abriendo el campo y permitiendo espacios para otros jugadores.Puedes optar también por ‘Desmarcarse’ pero teniendo en cuenta que buscamos la posesión, te puede generar desajustes en el juego.

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Ejemplo de jugada, con DC referencia, generando espacio a su espalda y descargando a otro jugador, en este caso el MI, en jugada de gol

Aunque nuestro objetivo es una presión fuerte, de inicio vamos a escoger un estilo defensivo Equilibrado. El motivo, no queremos que el equipo pierda la organización y el equilibrio. A partir de ahí, Anchura 8 de 10, para que nuestros centrales estén cerca de las bandas -a los MCD les hemos ordenado Marcaje del Centro, para que la parcela central no se desequilibre- y Profundidad 8 o 9 de 10, buscando una presión alta.

Se trata de una táctica que tiene como riesgo los balones en largo a la espalda de los centrales.

Es la 3-5-2 una táctica para tener la posesión. Por ello optaremos por un estilo ofensivo Posesión que nos permita manejar el balón en pases cortos.

Con jugadores de banda -MI y MD- apostaremos por un equipo ancho –Anchura 8 de 10– para atacar muy pegados a la banda. Sin embargo,y pese a la presencia de dos DC, no buscaremos los centros al área –Jugadores en Área 4 de 10– sino atacar en jugadas con pase al hueco y desmarque.

En Córners 3 de 5 y Faltas 3 de 5.

Hasta la irrupción de Mourinho el 4-2-3-1 era una formación muy poco desarrollada, entendida como una variante tanto de la 4-4-1-1, con un segundo delantero haciendo de enganche, o la 4-5-1, en este caso con cinco centrocampista. Sin embargo la irrupción del entrenador portugués en el fútbol internacional y su fijación por este dibujo provocó el cambio. Porque desde entonces la 4-2-3-1 se ha convertido en una táctica con mucha personalidad, aplicada por muchos equipos y con capacidad de adaptarse a multitud de sistemas de juego -defensivos u ofensivos- en función de los jugadores elegidos, especialmente en su doble pivote.

En sus inicios la 4-2-3-1 de Mourinho se basaba en un delantero volcado a banda izquierda –DI– y un volante –VOL– en banda derecha. El DI podía ser un extremo o un delantero siempre con tendencia a la diagonal interor hacia el área buscando el disparo o el pase, preferiblemente hacia el MCO en busca de un disparo desde la frontal. En el caso del VOL debía ser un extremo o un MD con alta capacidad de trabajo defensivo y ofensivo, pues era el responsable de equilibrar las transiciones ataque y defensa. En su caso, ocupación de banda, llegada a línea de fondo y centros al área. La posición de DC podía ocuparla un delantero rápido y regateador o bien un delantero centro matador y rematador en busca de los remates de cabeza.

La evolución del sistema en la vida real dejó la evolución de esta táctica en FIFA. Las posiciones de DI y VOL dejaron paso a las más naturales MI y MD así como a un dibujo sólido en defensa gracias a su doble pivote, que permite afrontar los partidos desde una alta intensidad, que permite gestionar fácilmente la posesión a través de la ocupación de espacios y superioridad de centrocampistas pero que ofrece la oportunidad de armar un juego a diferentes velocidades. Toman protagonismo los MCD -posición natural en el doble pivote- y el MCO. De sus condiciones partirá el estilo de juego que debemos adoptar.

Son los jugadores los que dan personalidad a la 4-2-3-1 y la primera y principal elección llega en el doble pivote. Inicialmente la 4-2-3-1 arranca desde dos MCD. Sin embargo debes reconsiderar la elección. No sólo debes preguntarte si quieres dos MCD dominadores en el aspecto físico o en el aspecto técnico, sino si quieres organizar el equipo en torno a una pareja MCD-MCD, una variante MC-MCD u otra mucho más ofensiva MC-MC.

En El Rincón de Chava te aconsejamos optar por mantener las posiciones originales MCD-MCD aunque buscando un equilibrio entre ambos. Es decir, elegir un MCD físico y un MCD técnico -podría ser un MC en posición de MCD o reconvertido-. El primero será el que lleve el peso físico del equipo -el trabajo ofensivo y defensivo no debe ser inferior a MEDIO-, el repliegue -box to box-, la presión y la ocupación de espacios gracias a su mayor resistencia, fuerza, agresividad, aceleración y velocidad, mientras que el segundo, un MCD más técnico y táctico, será el responsable tanto de dar orden al equipo -rasgos tácticos- y sentido al inicio de la jugada. Eso sí, en ambos casos hablamos de jugadores con buenos números defensivos -intercepciones, precisión de cabeza, marcaje, robos de balón o entrada agresiva-.

No obstante puedes construir el doble pivote desde dos MC -directamente en posiciones de MCD o reconvertidos- técnicos y tácticos, de buenos números defensivos pero con una alta capacidad de construcción de juego -creadores de juego, visión y pases cortos y largos- desde la primera línea de salida de balón. En este caso la posesión toma el protagonismo sobre la contra o la velocidad. Si optamos por una pareja física la creación y el toque pasan a un segundo plano -quedará en manos del MCO- para tomar protagonismo la intensidad, recuperación, alta presión y velocidad en el desarrollo del juego.

Y con la elección del doble pivote, la elección del MCO, eje del ataque. Protagonismo tanto como creador de oportunidades como finalización. La presencia de dos pivotes -uno de los cuales es interesante que se descuelgue al ataque- permite al 10 centrarse exclusivamente en la parcela ofensiva y creadora. Será el jugador que otorgue sentido al desarrollo de la jugada, claridad al juego de ataque y naturalidad al juego del único delantero. Hablamos de un mediapunta que completa al delantero, que puede sacar partido a cuestiones como la definicion, tiros lejanos o regates si queremos que funcione como un segundo delantero, o de un mediapunta -aspecto que recomendamos desde El Rincón de Chava- pasador con alta capacidad en visión de juego, control de balón o pases cortos, asi como aspectos como creador de juego y tiro de calidad.

Si optamos por usar tres MCO en lugar de los MI-MD en bandas, nos permite presionar el área –imagen 1– desde tres cuartos del campo siempre apoyados por los laterales, que tratarán de ocupar los espacios de extremos. Los MCD, pendientes de labores defensivas por las coberturas. Cuando usamos un MI muy ofensivo–imagen 2– el movimiento cambia. Este jugador entrará hacia dentro en faceta de delantero, liberando su zona para el lateral. La libertad de movimientos del MCO debe permitirle abrir huecos. Este esquema se puede repetir con el MD. En una faceta mucho más ofensiva –imagen 3– uno de los MCD hará funciones ‘box to box’. El despliegue ofensivo también llegará desde el otro de los laterales.

Ejemplo de plantilla 4-2-3-1 en Fifa18 Ultimate Team con dos MCD de importante presencia y despliegue físico, como son Luis Gustavo y Fabinho, dejando el mando de las operaciones a Sneijder, un MCO lento -la rapidez la ponen las bandas- pero de enorme capacidad en pases y disparo.

Instrucciones de Jugador, tipos de jugador y Táctica Personalizada

Esta táctica y estilo de juego están pensadas para buscar un juego ofensivo, tanto en juego largo como en corto, con mucha amplitud de banda y verticalidad de sus MD-MI

Dos centrales

Básicos. Al ser una formación con cuatro defensores no requieren de características especiales, como en una defensa de tres.

Dos laterales

Aunque es una formación con jugadores de banda como MD-MI, la presencia de dos MCD cubriendo las espaldas nos animará a sumar jugadores por banda. Por ello a los laterales les pediremos Unirse al ataque, Avance e Intercepciones Conservadoras. Apostar por esta faceta ofensiva de los laterales nos dará más libertad para los MD-MI en ataque. Esto nos permite además hacer un juego más abierto.

MCD- MCD

Anteriormente hemos analizado los tipos de ‘5’ por los que puedes optar. Por defecto seleccionamos Defensa Equilibrada, Quedarse atrás al atacar, Intercepciones agresivas para dar contundencia al centro del campo y Marcaje de las bandas. Este último se puede cambiar por Marcaje del centro. Puedes elegir que uno de ellos -nunca los dos- se unan al ataque con Adelantarse.

MD-MI

Como tenemos laterales, en defensa su apoyo defensivo será básico. Queremos un equipo que en ataque arranque abierto, por lo que pediremos a los MD-MI Quedarse en la banda y Desmarcarse, lo que dará amplitud y verticalidad a nuestro juego. También podemos escoger Tirar Diagonales. En este caso acuérdate de que tu DC se desmarque a banda.

MCO

Es constructor de juego. Sus instrucciones de juego predominantes serán Remate y Rechace, Libertad de Movimientos, y Bajar a Defender para que en defensa ayude en el centro del campo y ayude, desde una posición más retrasada, a la salida de balón. Priorizamos conceptos como el Pase Corto, Visión, Agilidad e incluso Posicionamiento. No importa su velocidad y aceleración. Preferimos otros valores.

Hay dos formas de enfocar su trabajo. Como punto de partida, ‘Quedarse en el centro’, para que se mueva por la parcela central, y Juego Mixto. Podemos escoger también que sea Desmarque.

Podemos optar por una segunda opción en la que genere espacio para los MCO, MD y MI. En este caso elegiremos Abrirse a las bandas y Desmarcarse o Falso 9 . Aconsejamos la primera opción.

Como punto de partida entendemos la 4-2-3-1, dado el número de centrocampistas con los que jugamos, como una formación para jugar desde el balón aunque con posibilidad de profunidad por banda. Por ello de inicio arrancamos con un estilo ofensivo Equilibrado para alternar el toque en corto y el desplazamiento en largo.

Los dos MCD y MCO nos dan fortaleza por dentro pero queremos sacar partida a los MI y MD por fuera. Por ello ensanchamos el equipo –Anchura 7 de 10– y rebajamos el número de efectivos a remate en el área –Jugadores en el área 4 de 10– dado que únicamente tenemos un DC y buscamos disparos desde fuera con los MCD y MCO así como los desmarques hacia el área de los MI-MD.

De inicio vamos a apostar un estilo defensivo Equilibrado buscando que sea el bloque el que marque presencia en el centro del campo. Los laterales y el marcaje de las bandas de los MC nos darán la anchura del equipo en defensa –Anchura 5 de 10- y optaremos por un equipo situado en el centro del campo –Profundidad 6 de 10–

Puedes optar por un estilo más agresivo con estilo Presión Fuerte y dotar al equipo de más profundidad para que presionen en campo rival.

Conocida como 4-2-3-1 en rombo cerrado, 4-2-3-1 Cerrado o 4-2-3-1 con 3 MCO, estamos ante una interesante variante de la 4-2-3-1 en la que cambiamos los MD-MI por dos MCO. El resultado, una formación semejante en dibujo pero diferente en el estilo de juego. De fuera, hacia dentro. Porque la forma de jugar con uno y otro dibujo no es la misma, aunque en muchos aspectos se asemejen. Os lo explicamos a continuación.

Posicionamiento la 4-2-3-1 Cerrada se apoya en una defensa básica de cuatro, con dos DFC-DFC y dos laterales a los que, sin MI-MD, podremos dar protagonismo en ataque. En el centro del campo dos MCD-MCD centrados en tareas defensivas y por delante tres MCO-MCO-MCO en los que recaerá toda la creatividad a la espalda de un DC que será la referencia del equipo en ataque.

Son los MCD dos jugadores importantes en la estructura del 4-2-3-1 Cerrado. Si en la 4-2-3-1 básica nos planteábamos la faceta defensiva-ofensiva a la hora de elegir el tipo de pareja MCD-MCD, en la 4-2-3-1 Cerrada la presencia de los tres MCO nos obliga a mirar a un doble pivote más pensado en el aspecto defensivo que en la construcción y el aspecto ofensivo. Una pareja de dos MCD-MCD encargados de suplir las carencias defensivas de los MCO y las espaldas de los LTD-LTI en sus incorsiones en ataque.

No obstante puedes construir el doble pivote desde dos MC -directamente en posiciones de MCD o reconvertidos- técnicos y tácticos con una alta capacidad de construcción de juego -creadores de juego, visión y pases cortos y largos- desde la primera línea de salida de balón si pensamos en un estilo de juego muy volcado a la posesión a costa de cierta vulnerabilidad en defensa.

Pero sin ninduna duda, el protagonismo en la 4-2-3-1 Cerrada es para los MCO. Tres jugadores pensados para tener la pelota, la posesión, pensados en hacer del pase al hueco para el DC o el disparo desde la frontal dos de las mejores armas de ataque. No consiste en cambiar los MD-MI por los MCO, consiste en jugar de otra manera. Abandonamos el juego por fuera, el desborde por velocidad en banda por la diagonal, la combinación, el toque y el desmarque en posiciones interiores.

Los tres MCO se convierten en los generadores del juego. Siempre por dentro. Desde de la medular a la frontal del área. Libertad total de movimiento. Son los jugadores que otorguen sentido al desarrollo de la jugada, claridad al juego de ataque y naturalidad al juego del único delantero. Hablamos de tres mediapuntas que completan al delantero, capaces de sacar partido a cuestiones como los tiros lejanos o los regates en la frontal y aspectos como los pases, la pared y la oportunidad desde el interior del área.

Los verdaderos protagonistas de este dibujo son los MCO, por lo que es primordial entender su juego en el ataque. Tres jugadores en los que priorizaremos atributos como el Pase Corto, Visión, Agilidad e incluso Posicionamiento por encima de la Velocidad o la Aceleración. Queremos jugadores de toque, pase y desmarque para, una vez en la frontal, decidir el final de la jugada. Tres jugadores con total libertad en tres cuartos del campo –imagen 1– con mucha movilidad en el interior y capacidad para desestabilizar al contrario. A partir de ahí miramos a los laterales. No queremos que sean los MCO los que corran la banda como si fueran MD-MI, queremos que esa función la ejerzan los LTD-LTI –imagen 2– que deberán aprovechar el espacio de la banda. Salida en amplitud una vez pasada la línea del centro del campo. Una vez elaboramos la jugada por dentro, se convierten en una segunda opción. En caso de que el rival sea capaz de tapar los pases interiores, recurrimos a los laterales como una salida natural.

Instrucciones de Jugador, tipos de jugador y Táctica Personalizada

Esta táctica y estilo de juego están pensadas para buscar un juego ofensivo en corto, por dentro, con mucha combinación de los MCO.

Dos centrales

Básicos. Al ser una formación con cuatro defensores no requieren de características especiales.

Dos laterales

Al ser una formación sin MD-MI a los laterales les pediremos Avance, Ataque Equilibrado, para que sus subidas acompañen el avance de los MCO, e Intercepciones Conservadoras. Podemos apostar por la orden Unirse al ataque, pero entonces recuerda que deberás darles uso en la zona de extremos y tendrás las espaldas descubiertas en caso de pérdida.

MCD- MCD

Por defecto seleccionamos Defensa Equilibrada, Quedarse atrás al atacar, Intercepciones normales y Marcaje de las bandas para cubrir las subidas de los laterales. Puedes seleccionar Marcaje del Centro si tus MCO colocados en banda tienen trabajo defensivo Alto, que no es lo habitual.

MCO-MCO-MCO

Son los constructores del juego. Sus instrucciones predominantes serán Remate y Rechace, Libertad de Movimientos, Intercepciones normales y Bajar a Defender para que ayuden en defensa y a la salida de balón. En el caso del MCO central podemos elegir Conservar la posición para que sea siempre la referencia en el eje del juego.

Hay dos formas de enfocar su trabajo. Como punto de partida, ‘Quedarse en el centro’, para que se mueva por la parcela centralyDesmarque en la que trataremos de buscar el pase al hueco.

Podemos optar por una segunda opción que consiste en Vía de ataque equilibrada y Ataque mixto.

Como punto de partida entendemos la 4-2-3-1 Cerrada como una formación para jugar con un Estilo Ofensivo Posesión para jugar en corto con los 3 MCO. Bien es cierto que lo puedes modificar a Estilo Ofensivo Equilibrado, dado que también responde bien.

Dado que jugamos sin MD-MI, que los MCO juegan por dentro y queremos manejar el juego en corto, no ensancharemos el equipo. Por ello Anchura 5 o 6 de 10 para respetar el dibujo y posicionamiento inicial de los jugadores. Como buscamos el juego en tres cuartos del campo, Jugadores en el área 4 de 10, dado que únicamente tenemos un DC y buscamos disparos desde fuera con los MCO.

Como en la 4-2-3-1 de inicio vamos a apostar por un estilo defensivo Equilibrado buscando que sea el bloque el que marque presencia en el centro del campo. La posición natural de los laterales será la que marque la anchura del equipo en defensa –Anchura 5 o 6 de 10– y optaremos por un equipo situado en el centro del campo –Profundidad 6 de 10– a la hora de defender.

Puedes optar por un estilo más agresivo con estilo Presión Fuerte y dotar al equipo de más profundidad para que presionen en campo rival.

Un clásico entre los clásicos. El 4-4-2 en rombo o 4-1-2-1-2 es quizá una de las tácticas que más predominaban en los años 90, cuando se convirtió entonces en la versión moderna, arriesgada y ofensiva del tradicional 4-4-2 y cuando el fútbol de extremos apenas se ponía en práctica más allá de la escuela holandesa.

Su dibujo es muy sencillo. Con una defensa en línea, el centro del campo estará dominado por un único MCD con buen nivel defensivo y disposición táctica para que no pierda la posición. Su labor en ataque será apenas anecdótica. Por delante un MCO organizador, con alto nivel en Pase Largo, Pase Corto, Visión, Clase y Jugón situado cerca de los delanteros. A los costados dos jugadores de banda (MI-MD) y en ataque dos delanteros en línea (DC-DC).

Existe una versión secundaria del 4-1-2-1-2 que surge del cambio del MCO por un MC más retrasado. El resultado es la 4-1-3-2. Un dibujo con el que se gana equilibrio en el centro del campo, dominio y posesión pero pierde verticalidad y rapidez.

Generación de juego desde el ‘rombo’

Una de las características del 4-1-2-1-2 es la generación de juego precisamente desde su rombo. Esta formación conlleva a la generación de juego en la zona central -imagen 1- en el rombo que genera el MCD, los jugadores de banda (MD y MI) y el MCO. Los pases y la capacidad de combinar entre estas cuatro piezas es fundamental, dando salida a la jugada hacia la zona de los delanteros.

Pieza clave en esa generación de juego ofensivo es el MCO -imagen 2-. Su capacidad para distribuir, dar pases al hueco y su visión de juego serán valores a tener muy en cuenta. Será el escalón entre el centro del campo y la delantera.

Todo ese trabajo de creación debe derivar y finalizar en los DC. Ya sea desde los MD y MI o desde la posición del MCO, el objetivo -imagen 3- es surtir balones al hueco hacia posiciones del ‘9’ o centros al área desde la banda, según nuestro estilo de juego o las características de nuestros delanteros.

Con dos delanteros y una distancia importante hasta el MCD, en el 4-1-2-1-2 el MCO se convierte en una pieza clave e indispensable en el enlace del juego. En la 4-1-2-1-2 -como en la 4-3-1-2- y dada la presencia de dos DC consideramos el ’10′ como el enlace en el juego de ataque.

El MCO en este dibujo está concebido para dar salida al juego de ataque, ser enlace entre el MI-MD en los cambios de juego, dar el último pase hacia posiciones de remate, generar desequilibrios entre líneas… Hablamos de una función más creadora que goleadora. Busca jugadores con niveles altos en características como visión, pases cortos, pases largos, agilidad e incluso regates. Ayudarán también Rasgos o Habilidades Especiales como Creador de Juego, Centrocampista o Pases Largos. Tu tipo de ’10’ determinará tu táctica personalizada.

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No obstante no debes olvidar nunca el estilo de juego que vas a emplear. Porque la 4-1-2-1-2 el MCO es quizá el principal protagonista y como tal le puedes convertir el centro de todas tus operaciones. Su posición de partida en el balcón del área le convierten en uno de los primeros beneficiados de los huecos que ofrezcan los delanteros. Pared en corto, desplazamiento al hueco y oportunidad directa de gol. Es una posibilidad para todos aquellos que opten por un 4-1-2-1-2 donde se apuesta por el pase en detrimento de los centros o los tiros a la hora de elaborar la táctica personalizada.

Si el ’10’ es importante, no lo es menos el ‘5’. Porque la 4-1-2-1-2 el rombo se asienta sobre dos figuras, el MCO y el MCD, un eje sobre el que pivota el éxito o fracaso de esta formación. De las condiciones de estos jugadores también dependerá que la formación y el juego sea un éxito. Si en el ’10’ no había duda alguna en la importancia de un jugador creador, en el ‘5’ las dudas radican en la elección entre un MCD más físico o más táctico. Y no suele ser sencillo decidir, porque ambas cosas no suelen darse en un mismo jugador.

En la 4-1-2-1-2 el ‘5’ tiene que mandar en la medular. No es una cuestión únicamente de fuerza y físico. Un MCD que maneje rasgos o habilidades tanto para la creación de juego -pases largos o liderazgo- como la defensa -entradas, intercepciones o entradas agresivas- nos permitirá estructurar nuestro juego desde el MCD tanto en faceta defensiva como el inicio de la ofensiva.

Instrucciones de Jugador y Táctica Personalizada

Vamos a construir una táctica personalizada para jugar en posesión, salida de balón en corto por dentro y llegada a zona de ataque por fuera, ya sea a través de los MI-MD o de los desmarques de ruptura de los DC-DC.

DFC-DFC. Instrucciones de jugador por defecto.
LI-LD. Nos interesa una función equilibrada tanto en ataque como en defensa. Por ello sus instrucciones serán Ataque equilibrado y Ataque mixto.
MCD. Buscamos un ‘5’ completo, capaz de defender y gestionar el primer pase en salida de balón. Sus instrucciones de juego pasarán especialmente por Quedarse atrás al atacar, Defensa equilibrada, Intercepciones Normales y Marcaje del centro. A la hora de buscar un jugador priorizamos conceptos como Resistencia, Intercepciones, Robo de balón, Entrada Agresiva, Pase Largo y Pase corto. Importante buscar un jugador con capacidad de trabajo defensivo Medio o Alto.
MCO. Es el constructor de juego. Sus instrucciones de juego serán Esperar rechace -queremos que se maneje en la frontal- libertad de movimientos -debe actuar por toda la medular- Intercepciones Normales y Bajar a defender, pues necesitamos que ayude en el centro del campo al MCD. Buscaremos un jugador con atributos elevados en Pase corto, Pase largo, Visión, Agilidad e incluso Posicionamiento. Interesante que tuviera una capacidad de trabajo defensivo Medio.
MI – MD. Jugadores con capacidad de juego Alto/Alto para ayudar en el repliegue y el ataque. Sus instrucciones de juego sonQuedarse en banda, Bajar a defender, Esperar el rechace y Apoyo Equilibrado dado ayuda a equilibrar la salida de juego mejor que Desmarcarse, lo cual les aleja demasiado del centro del campo, o Jugar en corto, lo cual ahoga los espacios.
DC-DC. Sus intrucciones son Quedarse en el Centro y Desmarcarse lo cual nos mermite jugar tanto con pases al hueco por el centro, aprovechar sus desmarques con en momentos concretos hacia la banda y sobre todohacer que se muevan cerca del área.

Vamos a apostar por un estilo defensivo Equilibrado (el equipo presiona en el centro el campo manteniendo la posición) ayudando con ello a que se sume el MCO. Para darle continuidad buscaremos que nuestro equipo se posicione en nuestro campo –Profundidad 5 de 10–y trataremos de dar solidez al equipo juntando líneas y jugadores con una Anchura 3 de 10. Queremos reducir los espacios.

Es la 4-1-2-1-2 una táctica para tener la posesión hasta llegar a posiciones de ataque. Optaremos por un estilo ofensivo Posesión (los jugadores buscarán los apoyos y pases cortos), si bien es cierto que un estilo Equilibrado puede funcionar.

Con jugadores de banda -MD y MI- y la presencia de un MCO centrado en el balcon del área abriremos el juego en ataque con una Anchura 7 de 10. Con dos DC y un MCO en la frontal, elegiremos Jugadores en el área 4 de 10.

En Córners 3 de 5 y Faltas 3 de 5.

Hablar de la 4-1-2-1-2 en rombo cerrado -es decir, sin MD y MI- es hablar de la 4-3-1-2, una táctica similar pero que FIFA diferencia en la presencia de un MC en lugar de un MCD. Una táctica muy a la italiana, poco habitual en la actualidad, que busca gestionar el juego desde la solidez en el centro del campo y convirtiendo las bandas en algo secundario. El juego se organiza sobre el armazón de un trivote -defensivo y ofensivo- que da cobertura a la zona del MCO.

Se trata de una táctica muy apropiada para el juego de toque, posesión y movilidad si la elección de jugadores pasa por jugadores técnicos. Puede ser una formación de mucha fuerza y empuje si la apuesta es por jugadores de físico potente.

La estructura básica de la 4-1-2-1-2 en rombo cerrado parte de una línea defensiva básica a partir de la cual se apoyo un trivote de infinitas posibilidades. Hablamos de jugadores técnicos, ofensivos, defensivos, físicos… para las posiciones de MC-MCD-MC en las que se organiza el centro del campo. Por delante de ellos un MCO que se suma a este cuarteto. Será el encargado de entrar desde la segunda línea, realizar el último pase al hueco, disparar desde la frontal o ingresar en el área como si de un tercer delantero se tratara. Por delante dos DC.

¿Qué tipo de centro del campo escogemos?

Cuando decides escoger como formación la 4-1-2-1-2 rombo cerrado debes hacerlo teniendo en cuenta que el cuarteto de centrocampistas son la clave del sistema. Buen ejemplo supone la Juventus 2013-14 con un centro del campo configurado por Pirlo, Marchisio, Pogba y Vidal, cuatro jugadores que combinaban a la perfección técnica y pase con despliegue físico, defensivo, llegada y remate.

Cabe decir que no existe un centro del campo estándar para este tipo de formación, existen tantas combinaciones como jugadores mezcles en el cuarteto.

La 4-1-2-1-2 en rombo cerrado está conformada por cuatro centrocampistas puros, colocados en el centro del campo con el objeto de dominarlo y convertirlo en el eje de todo lo que pase. Bien con MC o con MCD, el objeto básico es reunir cuatro jugadores que combinen lo defensivo, lo ofensivo, lo físico y lo técnico. Dada la presencia de cuatro centrocampistas, no es necesario que el MCD sea físicamente poderoso siempre y cuando se le arrope de dos MC que permitan apoyar sus carencias defensivas. En este caso -imagen superior- buscaremos que el MCD sea técnicamente el protagonista, como pasaba con Pirlo, escoltado por jugadores con despliegue como Marchisio, Vidal y Pogba. La labor de creación arranca en el MCD.

Otro buen ejemplo de un 4-1-2-1-2 es el PSG 2014-2015 con Motta como MCD puro y escoltado por Matuidi y Verrati. Se forma un trivote de corte mucho más defensivo, táctico, de presión alta, destrucción y presencia zonal en el centro del campo. En este caso es importante un MCO creativo, en este caso Pastore, que asume desde tres cuartos del campo la labor de la creación.

Puedes hacer una apuesta directa por la creación, la posesión y la defensa desde el balón, a costa de perder despliegue físico, agresividad y capacidad defensiva, con un centro del campo como el que formaba el Real Madrid 14-15 con Kroos, Modric, James e Isco. Ningún pivote defensivo puro. Centrocampistas -incluso mediapuntas- todos ellos de construcción y creación para dominar la pelota. Es caso de apostar por la posesión es una de las combinaciones recomendadas.

Y en esa apuesta por lo ofensivo un paso más es situar no sólo jugadores creativos -incluso mediapuntas- en posiciones de centro del campo, sino a un delantero en la posición del vértice superior del rombo. Buen ejemplo, el Barcelona 14-15 con Busquets, Iniesta, Rakitic y Messi en el vértice del ataque. El MCO se convierte en un falso 9.

Como punta del vértice, el MCO es una pieza clave. Si en la 4-2-3-1 hablamos del mediapunta como un complemento perfecto a la hora de atacar directos la portería rival, en la 4-1-2-1-2, dada la presencia de dos DC, parece más adecuado pensar en un ’10’ como generador de desequilibrio en la frontal del área, ya sea con un pase al hueco, un disparo o una ruptura de líneas con una acción individual. Buscamos una función más creadora que goleadora. Busca jugadores con niveles altos en características como visión, posicionamiento, pases cortos, pases largos, agilidad y regates. Ayudarán Rasgos o Habilidades Especiales como Creador de Juego, Centrocampista o Pases Largos.

En la 4-1-2-1-2 en rombo cerrado nuestro ‘5’ estará arropado por dos MC. Como has podido ver anteriormente hay muchas formas de construir el centro del campo que afectan al MCD. Si la Juventus lo hacía con Pirlo, siendo su MCD su creador de juego, el PSG lo hacía con Motta, siendo su MCD su primer defensa.

Si los dos MC son físicos y con buenas capacidades defensivas, podrás apostar por un MCD volcado en la generación del juego y autor del primer pase en la jugada. Si los dos MC son jugadores creativos, te recomendamos un MCD más bien defensivo.

Generación de juego… desde el ‘rombo’

Como en la 4-1-2-1-2 en rombo, en la 4-1-2-1-2 en rombo cerrado la generación de juego parte desde el rombo. Esta formación conlleva a la generación de juego en la zona central -imagen 1- en el rombo que forman el MCD, los MC y el MCO. Los pases y la capacidad de combinar entre estas cuatro piezas es fundamental. El MCO -imagen 2- se convierte en una pieza clave. Su capacidad para distribuir, dar pases al hueco y su visión de juego serán valores a tener muy en cuenta.

No obstante en la 4-1-2-1-2 en rombo cerrado, dada la presencia de cuatro centrocampistas, el peso de la generación de juego puede recaer en todos ellos. Bien es cierto que el MCO es una pieza fundamental, pero -imagen 3- el resto de piezas pueden convertirse en otros generadores, lo que permitiría dominar el juego en el centro del campo.

Dado que en nuestra 4-1-2-1-2 en rombo cerrado no hay bandas propiamente dichas es interesante que los laterales sean los encargados en primera instancia de asumir –imagen 1– el protagonismo por bandas. El objetivo es crear superioridad a partir del centro del campo –imagen 2– junto a los MCD, MC y MCO. Es interesante por tanto buscar laterales cuya proyección ofensiva supere a la defensiva. Resistencia, potencia, velocidad o centros te pueden ser características muy útiles.

Instrucciones de Jugador, tipos de jugador y Táctica Personalizada

Dos centrales

Básicos. Al ser una formación con cuatro defensores no requieren de características especiales, como en una defensa de tres.

Dos laterales

Dado que es una formación sin jugadores de banda nos interesa su función ofensiva. Para ello elegiremos ‘Unirse al ataque’ y ‘Ataque Mixto’ y buscaremos laterales con buenos valores en centros y velocidad. Podemos bajar su aportación ofensiva cambiando ‘Unirse al ataque’ por ‘Ataque equilibrado’, más moderado.

MCD

Anteriormente hemos analizado los tipos de ‘5’ por los que puedes optar. En cualquiera de los casos sus instrucciones de juego básicas serán ‘Quedarse atrás al atacar’ y ‘Marcaje del Centro’.

MC-MC

El doble MC-MC que flanquea al MCD tiene, por igual, la obligación de construir y destruir. Como punto de partida apostamos por ‘Libertad de movimientos’, ‘Esperar al rechace’, ‘Ataque equilibrado’ y ‘Marcaje de las bandas’. Una vez compruebes cómo se mueven tus jugadores existe una opción más ofensiva que pasa por cambiar ‘Quedarse atrás al atacar’ por ‘Adelantarse’ para que tus MC sean más activos ofensivamente. Puedes rebajar un poco su ímpetu con ‘Quedarse atrás al atacar’ y ‘Conservar la posición’.

Puedes optar por dos MC técnicos -pase corto, pase largo, visión o agilidad- o dos MC físicos -con valores predominantes como resistencia, intercepciones, robo de balón o entrada agresiva- si quieres un despliegue y presión mucho más intensa, dejando el apartado técnico para otros jugadores, como el MCO o el MCD.

MCO

Es constructor de juego. Sus instrucciones de juego predominantes serán Remate y Rechace, Libertad de Movimientos, y Bajar a Defender para que en defensa ayude en el centro del campo formando una dura línea de cuatro. Priorizamos conceptos como el Pase Corto, Visión, Agilidad e incluso Posicionamiento.

DC-DC

Hay dos formas de enfocar su trabajo. Como punto de partida, ‘Quedarse en el centro‘, para que se mueva por la parcela central, y ‘Desmarcarse‘. Queremos que sean nuestra referencia en el área para los centros desde los laterales y pases al hueco del MCO. La segunda opción ‘Abrirse a las bandas’ y ‘Desmarcarse‘. En este caso el juego será vertical y en velocidad. Así pues si en la primera opción buscaremos delanteros con buenos números en la Definición, Precisión de Cabeza, Salto o Agresividad, en la segunda miraremos otros valores como la velocidad, aceleración o disparo.

Como punto de partida entendemos la 4-1-2-1-2, dado el número de centrocampistas con los que jugamos, como una formación para jugar desde el balón. Por ello el estilo ofensivo será Posesión, buscando los jugadores los apoyos en corto. Si no nos sentimos cómodos lo modificaremos a estilo ofensivo Equilibrado alternando toque en corto y el desplazamiento en largo.

Tenemos una formación que se hace fuerte por dentro pero necesitamos dar espacio a nuestros MC para e juego. Por ello en ataque Anchura 8 de 10 para facilitar los espacios por dentro. Aunque tenemos dos DC podemos apostar por un valor bajo de centros al área –Jugadores en el área 4 o 5 de 10– para buscar la importancia de los MC y sus disparos desde fuera del área.

De inicio vamos a apostar un estilo defensivo Equilibrado. Para que funcione mejor necesitamos que el equipo tenga presencia en campo rival –Profundidad 8 de 10– . Los laterales y el marcaje de las bandas de los MC nos darán la anchura del equipo en defensa –Anchura 7 de 10-.

Es la 4-2-2-2 una formación tan complicada de encontrar en el fútbol real como en Fifa Ultimate Team. Y es que se trata de una formación que en muchos casos puede acabar confundiéndose con una 4-4-2 si los MCO, protagonistas indiscutibles de la misma, juegan pegados a la banda, o con una 4-2-4 si los MCO son plenamente ofensivos, ejerciendo de falsos delanteros y falsos extremos.

La 4-2-2-2 se compone de una línea básica de cuatro defensores con función ofensiva para los LTD y LTI. En el centro del campo un doble pivote formado por dos MCD-MCD. El buen equilibrio del equipo estará en sus manos. Primer pase, transición entre bandas y apoyos a los jugadores en tres cuatros del campo. Las bandas son en este caso el punto de partida de los dos MCO-MCO. Libertad absoluta de movimientos para ambos jugadores de bandas.Juego interior. La banda para los laterales. Distribución hacia dentro, ruptura en diagonal y combinación con los delanteros. En ataque doble pareja de DC-DC.

Uno de los problemas que puede generar la 4-2-2-2 es el desequilibrio defensivo que se genera -imagen 1- por la ausencia de enganche -ya sea MC o MCO centrado- y la distancia entre los MCD y DC. Es una de las debilidades que puede encontrar tu oponente.

Uno de los objetivos a la hora de defender en este sistema será -imagen 2- achicar espacios en la zona central buscando defender en una especie de 4-4-2, convirtiendo el centro del campo en la zona de presión.

En ataque -imagen 3- el 4-2-2-2 aconseja la libertad de movimientos de los cuatro jugadores ofensivos. Diagonales y juego interior de los MCO, pase al espacio, desmarque de los DC y apoyo de los laterales en posición de extremos.

En la 4-2-2-2 los MCO arrancarán desde banda para ocupar posiciones de interiores, creando superioridad por dentro y generando un espacio por fuera que pueden aprovechar los laterales. Puedes optar por un lateral cuyo despliegue le convierta, con posesión de balón, en centrocampista, o algo más, llevándole a posiciones de línea de fondo para sacar partido a todo el carril, generando así superioridad en tres cuartos de campo.

Instrucciones de Jugador, tipos de jugador y Táctica Personalizada

La táctica personalizada que hemos creado es para un juego de posesión, de movilidad ofensiva y buscando que el equipo en defensa se posicione en el centro del campo.

DFC. Instrucciones de jugador por defecto.
LTD-LTI. Queremos que nuestros laterales se sumen al ataque ocupando las bandas. Para ello elegiremos ‘Unirse al ataque’ y ‘Avance’. En defensa, ‘Intercepciones Conservadoras’.
MCD-MCD. ‘Quedarse atrás al atacar’, ‘Intercepciones Normales’ y ‘Marcaje del centro’. Dado que suele ser una táctica que tiende a convertirse en 4-2-4, te ayudará un centro del campo físico. Puedes elegir que uno de los MCD en los apoyos en ataque tenga ‘Ataque Equilibrado’ e incluso ‘Adelantarse’ para crear apoyos y superioridad en tres cuartos, creando una 4-1-3-2 en ataque.
MCO-MCO. En defensa ‘Bajar a defender’. Necesitamos que ocupen la banda. En ataque ‘Libertad de movimientos’ y ‘Rechace y remate’. Puedes escoger también ‘Entrar al remate’. Dado que son jugadores que en ataque abandonarán la banda, deberás buscar conceptos como Visión, Pase Corto, Posicionamiento e incluso Disparo Lejano, muy útil para sorprender desde la frontal, el espacio que queremos que ocupen.
DC-DC. Como punto de partida ‘Desmarcarse’, y preferiblemente ‘Abrirse a las bandas’. No buscamos delanteros centros rematadores de área, sino jugadores hábiles en el desmarque, combinativos y ágiles.

Si jugamos con dos MCO es porque queremos que entren en contacto con el balón. Por ello el estilo ofensivo será Posesión. El protagonismo deben tomarlo por dentro los MCO una vez entren en contacto con el balón. Anchura 5 de 10 -se puede subir hasta 7- y Jugadores en área 2 de 10, dado que renunciamos a los centros.

En Córners 3 de 5 y Faltas 3 de 5.

Hemos dicho con anterioridad que queremos que el equipo se instale en defensa en el centro del campo. Por ello el estilo defensivo será Equilibrado con una Anchura 5 de 5 -podemos subirla a 7- y una Profundidad 5 de 5.

Un clásico entre los clásico. La formación 4-4-2 fue, sin duda alguna, el referente futbolístico de finales de los 80 y comienzos de los 90. Entonces pocos eran los entrenadores capaces de contradecir los principios de una formación cuya clave principal es su equilibrio en todas las líneas, formando un bloque tanto en defensa como en ataque. Hoy en día ya no es el libro de cabecera, pero sí una formación muy utilizada cuando se busca equilibrio y el control del partido gracias a su sencillez a la hora de desarrollarla y aplicarla sobre el césped. Sus resultados, si se aplica correctamente, evidentes. Precisamente ‘Cholo’ Simeone, con el Atlético de Madrid, ha demostrado que puede ser una formación muy útil para defender, y atacar, ya sea manejando el balón como a la contra.

El 4-4-2 gira sobre el equilibrio y la compenetración tanto en ataque como en defensa de dos líneas de cuatro donde todos atacan y todos defienden. De la buena gestión de los espacios entre las líneas radicará la potencia defensiva de un sistema con tres posiciones destacadas como son los centrocampistas, los jugadores de banda y los dos delanteros. Los dos MCD-MCD o MC-MC en su versión ofensiva deben equilibrar ataque y defensa por igual, capaces de hacer por igual labores de ataque y defensa. En ocasiones -unas veces de forma predeterminada y en otras en función del desarrollo del juego- uno de los centrocampistas pueden descolgarse al ataque para ayudar en las labores de construcción. Una de las opciones para favorecer la construcción es un doble pivote confeccionado por una pareja constructiva y destructiva, una combinación de MCD- MC. Los MI-MD deben ser piezas que aporten superioridad en ataque y defensa en un sistema en el que lo importante es mantener la posición.

El 4-4-2 es una formación equilibrada cuya fortaleza se hace especialmente patente en labores defensivas, donde bien empleado resulta una formación especialmente complicada de superar en el que se hace muy útil el modelo jaula, líneas muy juntas con apoyos cercanos y constantes de compañeros. Se puede aplicar una presión defensiva alta en la que -imagen 1- el equipo empuja desde atrás hacia adelante, desde los defensas a los delanteros buscando ejercer presión en el centro del campo e impidiendo la generación de juego del rival en la medular. Su punto flaco, balones largos a la espalda de la defensa, pases al hueco a la carrera del extremo o delantero y cansancio de los jugadores.

Otra opción totalmente diferente es la defensa en campo propio -imagen 3- en la que la defensa se coloca al borde del área pequeña y los delantero en el centro del campo. Entre medias los centrocampistas. Esta opción defensiva permite al rival manejar el balón con relativa facilidad hasta la medular, donde empiezan los problemas. En este caso los pases largos a la espalda de la defensa no son un peligro, pero sí los disparos desde la frontal -el juego rival se generará en tres cuartos de cancha- y los balones filtrados al hueco serán un mano a mano con el portero. Por último, la opción intermedia -imagen 2- en la que no se hace hincapié en ninguna forma específica de presión permite colocar al equipo de manera ordenada a lo largo de todo el campo.

Con dos delanteros, y sin un MCO referencia, una de las mejores opciones ofensivas que presenta la 4-4-2 es sin duda explotar las bandas –imagen 1– como la mejor manera de alcanzar las posiciones ofensivas. Se convierten en los mejores enlaces entre la zona de mediocampo y el área rival.

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Alcanzadas las inmediaciones del área rival –imagen 2– la primera opción y la más natural que presenta el 4-4-2 es el centro al área con el objetivo de sacar el mejor rendimiento a los dos delanteros centros. Existe una zona que, de forma predeterminada, puede quedar vacía -imagen 3- cuando ambos centrocampistas son defensivos y es la zona de tres cuartos. Se puede solventar si uno de los dos pivotes es MC y se descuelga en ataque, si optamos por un DC haciendo funciones de segundo delantero o falso ‘9’, si el MD-MI tienen la instrucción de trazar diagonales hacia adentro o si en posiciones de MD-MI colocamos MCO.

Con dos MD-MI ocupando la banda en funciones ofensivas, debemos plantearnos el protagonismo de los laterales –LTI-LTD– en el juego. La solidez defensiva y el equilibrio marcan las pautas iniciales para decidir qué tipo de laterales queremos. Mejor lentos pero seguros. Contribuyen a sostener el bloque defensivo. Si es la faceta ofensiva la que primamos, si nuestros MD-MI entran hacia el interior, debemos buscar laterales ofensivos, con velocidad, aceleración, resistencia y capacidad de centros, pues harán las funciones de falsos extremos. Se corre el riesgo de duplicar posiciones en ataque, con el MD-LTD o el MI-LTI ocupando el mismo puesto y estorbándose cuando ataquemos. Atentos.

Juego directo con la 4-4-2

En los últimos años el 4-4-2 se ha empleado por entrenadores que buscaban la fortaleza defensiva y en ataque la apuesta por el juego más directo, obviando la construcción y el dominio de la posesión. En este caso el objetivo cuando se está en posesión de la pelota es filtrar desde posiciones de centro del campo –imagen 1– el balón hacia zonas de ataque. En este caso se busca la espalda de los defensores. Es de imaginar que en este tipo de juego ofensivo deben predominar los delanteros veloces y buen disparo por encima de los ‘9’ referencia, más lentos aunque con más capacidad para rematar de cabeza. En un juego tan directo debes pensar en una pareja MCD-MCD física y potente, así como los MD-MI muy verticales y con capacidad de pase, centro, regate y llegada al área rival .

Ejemplo plantilla 4-4-2 FIFA 18 Ultimate Team con 2 MCD de alto despliegue físico sobre el campo. Los MD-MI son protagonistas como jugadores verticales, de mucha llegada a posiciones de centro y definición.

Instrucciones de Jugador, tipos de jugador y Táctica Personalizada para juego directo

Esta táctica y estilo de juego están pensadas para buscar un juego ofensivo, tanto en juego largo como en corto, con amplitud de banda y verticalidad de sus MD-MI así como desmarque de los DC

Dos centrales

Básicos. Al ser una formación con cuatro defensores no requieren de características especiales, como en una defensa de tres.

Dos laterales

Al ser una formación con MD-MI con mucha presencia ofensiva, equilibraremos la aportación de los laterales al ataque. Por ello Ataque Equilibrado, Ataque Mixto e Intercepciones Normales. Puedes apostar por una faceta más ofensiva de los laterales con Avance.

MCD- MCD

Por defecto seleccionamos Defensa Equilibrada, Quedarse atrás al atacar, Intercepciones Normales, y Marcaje del Centro. Puedes elegir que uno de ellos -nunca los dos- se unan al ataque con Adelantarse convirtiéndolo en un ‘box to box’.

MD-MI

Como la 4-4-2 es una formación que prioriza el equilibrio, en defensa Bajar a defender. Queremos un equipo que en ataque arranque abierto, por lo que pediremos a los MD-MI Quedarse en la banda y Desmarcarse, lo que dará amplitud y verticalidad a nuestro juego. También podemos escoger Tirar Diagonales. En este caso acuérdate de que tu DC se desmarque a banda.

DC-DC

Hay dos opciones. La primera opción ambos DC Vía de ataque equilibrada y Desmarcarse, que es la opción que aconsejamos, haciendo un juego muy directo y al espacio

La segunda opción uno de los DC Vía de ataque equilibrada y Referencia y el otro DC Vía de ataque equilibrada y Desmarcarse. Con ello tendremos tanto la opción de ataque posicional como al hueco y el espacio.

Dado la disposición de los jugadores y aunque la apuesta es el juego directo, el punto de partida será un Estilo Ofensivo Equilibrado para alternar el toque en corto y el desplazamiento en largo.

Queremos sacar partida a los MI y MD por fuera. Por ello ensanchamos el equipo –Anchura 7 u 8 de 10– y en el número de efectivos en el área –Jugadores en el área 5 o 6 de 10– buscamos una presencia clara de los DC dado que no disponemos de jugadores en segunda línea como un MCO.

De inicio vamos a apostar un estilo defensivo Equilibrado buscando que sea el bloque el que marque presencia en el centro del campo. La anchura del equipo en defensa ya nos la proporciona los laterales y los MD-MI, por lo que mantendremos niveles equilibrados –Anchura 5 de 10- y optaremos por un equipo situado en el centro del campo –Profundidad 6 de 10–.

Juego en posesión con la 4-4-2

Hemos hablado de la 4-4-2 como una formación equilibrada, sólida en defensa y que en ataque se adapta, gracias a la disposición de sus jugadores y la ausencia de un MCO, al juego directo y vertical. Sin embargo te vamos a explicar cómo poder desarrollar tu 4-4-2 desde la posesión del balón.

Ejemplo de plantilla 4-4-2 Fifa Ultimate Team 2018 con dos MC como Modric y Koke. Unidos a Isco y Asensio en bandas se trata de una apuesta por la posesión, el toque por delante de la velocidad.

En este caso no es la velocidad ni le verticalidad lo que impera, sino el toque, el apoyo en corto y la técnica. Cambian el estilo de juego y por lo tanto los jugadores que necesitamos. Empezando por el centro del campo. Ya no hablamos de dos MCD físicos y robustos. Hablamos de dos MC-MC capaces de mantener la pelota, moverla y actuar desde segunda línea si hace falta.

Si hablamos de toque, posesión, paciencia… ¿Podemos hablar de situar dos MCO en posiciones de MD-MI? El paso de los años y una mayor apuesta por los centrocampistas creativos y los mediapuntas han incrementado las opciones.

¿Por qué un 4-4-2 con MCO en bandas si existe la 4-2-2-2?

Es cierto que FIFA nos ofrece la 4-2-2-2 que nos permite jugar con dos MCO en banda. Sin embargo la 4-4-2 con MCO en banda nos permite disfrutar del equilibrio, la solidez y el posicionamiento de la 4-4-2 aportando a nuestro juego dos MCO que por sus condiciones nos hagan gobernar el partido desde el centro del campo. El Real Madrid 2017-18 y una teórica línea formada por Isco-Kroos-Modric-Asensio podrían ser uno de los mejores ejemplos. Se ataca por dentro. Dos MCO volcados en banda durante la faceta defensiva e inicio de jugada, jugando por dentro cuando se trata de faceta ofensiva, quedando la banda a los dos laterales. Superioridad en tres cuartos del campo. Toque en corto hasta encontrar el hueco.

Instrucciones de Jugador, tipos de jugador y Táctica Personalizada para juego elaborado

Esta táctica y estilo de juego están pensadas para buscar un juego elaborado, en corto, con paciencia y que parta desde el pase en horizontal, no tanto en vertical. Queremos dar protagonismo a los MCO.

Dos centrales

Básicos. Al ser una formación con cuatro defensores no requieren de características especiales, como en una defensa de tres.

Dos laterales

Al carecer de MD-MI optamos por Ataque Equilibrado, Avance e Intercepciones Normales.

MCD- MCD o MC-MC

Por defecto seleccionamos Defensa Equilibrada, Quedarse atrás al atacar, Intercepciones Normales, y Marcaje del Centro. Si son MC elegiremos Esperar rechace. Queremos que se mantengan en la medular como eje del juego.

MD-MI o MCO-MCO en posiciones de MD-MI

Como la 4-4-2 es una formación que prioriza el equilibrio, en defensa Bajar a defender. Como queremos priorizar el toque,el apoyo y la posesión elegimos Libertad de Movimientos y Jugar en corto. La banda quedará por defecto para los laterales. Completamos las instrucciones con Esperar al rechace e Intercepciones normales.

DC-DC

Queremos que los DC sean parte de este juego de posesión, pero no queremos que pierdan la referencia del área. Por ello renunciamos a elegir ‘Falso 9’, ‘Desmarcarse’ o ‘Referencia’ y elegimos Vía de ataque equilibrada y Ataque mixto. Ello nos facilita disponer de los DC para cerrar las jugadas con pases al hueco, disparo desde la frontal o centros al área.

Dado que se trata de una táctica que busca la posesión, el primer paso para ello parte de escoger un Estilo Ofesivo Posesion desde el que dar sentido a las instrucciones personalizadas a cada jugador y priorizar el toque en corto.

Aunque queremos el toque en corto, necesitamos espacios para el pase y desmarque. Para ello buscaremos una Anchura 6 o 7 de 10. Será una táctica en la que el equipo irá avanzando poco a poco hacia el área, donde elegimos Jugadores en el área 5 o 6 de 10.

De inicio vamos a apostar un estilo defensivo Equilibrado buscando que sea el bloque el que marque presencia en el centro del campo. La anchura del equipo en defensa ya nos la proporciona los laterales y los jugadores situados en banda, por lo que mantendremos niveles equilibrados –Anchura 5 de 10- y optaremos por un equipo situado en el centro del campo –Profundidad 6 de 10–.

De inicio puede parecer un sistema casi en desuso y olvidado. La irrupción del 4-2-3-1 y el paso de la época dorada de los segundos delanteros influyó en ello. Así podría calificarse actualmente el 4-4-1-1, un sistema muy empleado a finales de los 90, especialmente en Inglaterra, en una época en la que el mediapunta era una posición poco apreciada -todo lo contrario a la actualidad- y en la que buena parte de las grandes figuras del fútbol europeo ocupaban la posición del segundo delantero, jugadores que, por sus condiciones, rendían mejor por detrás de un ‘9’. Con menor capacidad de creación de juego que un mediapunta pero con mayor vocación de remate, regate y visión de los huecos y los espacios que ofrecía el delantero. Era la época dorada de los Raul, Totti, Del Piero, Inzaghi, Rooney… Era la época dorada del ‘7’, jugadores con capacidad de trabajo para sacar el balón, construir juego y completar el ataque. Sin embargo la explosión del mediapunta y la llegada del 4-2-3-1 casi omnipresente en todos los equipos han dejado el 4-4-1-1 en casi un recuerdo.

Con una defensa de cuatro básica, en el medio campo forma con un doble pivote (puedes variar entre dos MCD, dos MC o con una combinación entre ambos) en línea con los jugadores de banda clásicos (MI–MD) por detrás de la figura del segundo delantero, el SD. Para emplear este sistema es conveniente tener un SD con capacidad de trabajo -alta en ataque y defensa – y buena capacidad de pase. Igualmente es interesante que el ‘9’ sea un jugador rematador y buena capacidad de definición y cabeza.

El juego en ataque en la 4-4-1-1 pivota alrededor del segundo delantero -image 1- un jugador que preferiblemente tendrá una buena capacidad de pase y generación de juego, dado que es el encargado de enlazar con el delantero. Un sistema que lleva a un juego de elaboración que permita la incorporación -imagen 2- del resto de jugadores, preferiblemente los jugadores de banda, lo que por momentos dibujará sobre el césped una especie de 4-2-3-1. Y si en el inicio de la jugada el segundo delantero tiene un importante papel, en la resolución también puede tenerlo. Sus movimientos -imagen 3- pueden ir encaminados a diversos finales. Teniendo en cuenta que es un sistema en el que se juega con un ‘9’ fijo y rematador, una de las posibles opciones es un centro al área desde las bandas buscando un remate, al que se incorporaría el SD, para lo que sus movimientos de ataque deberían ser hacia el área:

Pases: 45/ Centros: 77 / Tiros: 53 / Posición: Organizada

Teniendo en cuenta las capacidades del SD, otra de las opciones es lanzar pases al hueco, ya sean desde el propio SD hacia el ‘9’ o los jugadores de banda, o que sea éste el que los aproveche llegando desde segunda línea. Aceleración o Velocidad como rasgos de ese segundo delantero puede facilitar esta labor:

Pases: 67 / Centros: 50/ Tiros: 55 / Posición: Organizada

En cualquiera de ambos casos podemos aprovechar la situación del SD en la frontal del área para potenciar la capacidad ‘Tiros’. Será importante que el segundo delantero tenga una buena tasa de disparo. En caso contrario será mejor rebajar dicho valor.

Táctica básica personalizada recomendada:

Velocidad: 45/ Pases: 49 / Posición: Organizada

Pases: 67 / Centros: 75 / Tiros: 55 / Posición: Organizada

Presión: 57 / Agresividad: 36 / Anchura: 66 / Cubrir

¿Cómo jugar con el SD?

El segundo delantero es el jugador clave desde el que entender la 4-4-1-1, un ‘9’ con alma de ’10’. Porque el segundo delantero es un jugador que, siendo delantero, por sus condiciones intrepreta el juego más como un enlace hacia el gol, ajeno o propio. Y es ahí donde radica su distancia con el mediapunta.

El delantero centro cohabita a la espalda del ‘9’, en los espacios que el delantero referencia le ofrece en su brega particular con los centrales. De saber aprovechar este espacio, tanto para dar claridad en el juego como para romper las líneas hacia el gol, radica el éxito del jugador y la táctica.

Entendida esta diferencia deberás aprovechar la presencia del SD -segundo delantero- en la zona de tres cuartos para aprovechar los espacios por delante de la defensa para recibir el balón y , a partir de este instante, tomar diferentes decisiones, desde abrir la jugada a la banda, devolver el juego a los centrocampistas, buscar el pase al DC o buscar la entrada al área -con jugada individual o con una pared con el ‘9’- para buscar el gol. Y es quizás este último aspecto donde el SD debe sorprender al rival y marcar distancias con el mediapunta.

Combinación, capacidad de pase en corto, disparo colocado, regate y entrada desde segunda línea hacia el gol son algunas de las cualidades que debe mostrar un segundo delantero.

Aunque por semejanzas con la 4-4-2 se podría entender que la labor de los laterales es similar, lo cierto es que varía. Varía por la presencia del SD. Con un jugador en segunda línea, jugando por dentro, los jugadores de banda no invadirán su espacio. Por ello la presencia de los laterales en situación de extremo será coyuntural.

El 4-3-3 es una de las formaciones predilectas en Fifa, y en especial en FIFA19. Es una de las formaciones que permite con mayor facilidad el juego directo y en velocidad. Y ello, con una gran cantidad de opciones y posibilidades tácticas y posicionales.

Porque si todas parten de una defensa de cuatro (LTD-DFC-DFC-LTI) y dos extremos (ED-EI), a partir de ahí surgen las variantes. Con tres centrocampistas (MC-MC-MC), con un pivote (MC-MCD-MC), con un mediapunta (MCD-MCO-MCD) o con falso nueve (ED-SD-EI) como punto de partida básico, pasando por todas las variantes que puedas realizar con cambios de posiciones en el centro del campo (desde la MCD-MCD-MCD a la MCD-MC-MCO) así como el posicionamiento de los mismos -en línea o escalonado- sobre el terreno de juego. Aunque en El Rincón de Chava recomendamos la básica, la formada en el centro del campo por MC-MCD-MC.

Hablamos de que son los jugadores del centro del campo los que determinarán la naturaleza del 4-3-3, más ofensiva, defensiva o equilibrada, pero también el tipo de delantero centro, más estático o veloz, así como los extremos, más pasadores o finalizadores.

¿Cómo atacar en una 4-3-3?

La forma de atacar en un 4-3-3 dependerá de nuestro estilo de juego -más directo o en posesión- así como de los jugadores que lo forman y por tanto la ocupación de espacios en faceta ofensiva. En el 4-3-3 disponemos de tres jugadores en ataque, con la característica de que dos de ellos –ED y EI– parten muy abiertos. Dos extremos cuya movilidad podemos aprovechar para plantear diversas formas de ataque. Dos extremos que no tiene por qué jugar pegados a banda. Una de las opciones -imagen 1- es que los extremos busquen con diagonales al área rival, ocupando posiciones de delanteros y buscando el disparo o el remate a puerta. En este caso podemos hacer que nuestros laterales se añadan al ataque ocupando los espacios en banda. Estos espacios -imagen 3- también pueden ser utilizados por nuestros MC-MC. La forma básica de ataque –imagen 2– es la de los extremos pegados a banda, alcanzando posiciones de línea de fondo y los MC acompañando la jugada hasta el borde del área.

Son los interiores –MC-MC– dos piezas claves a la hora de desarrollar el tipo de juego ofensivo. Dos jugadores que desarrollarán su labor ofensiva -imagen 1- en un triángulo imaginario que se focaliza hacia la frontal del área, donde los interiores tienen la capacidad para llegar con su influencia. A partir de ese punto, y en función de la táctica personalizada elegida, se abren opciones como puede ser la opción del disparo -imagen 2- desde la frontal o bien la opción del pase -imagen 3- hacia las diversas opciones de ataque, ya sea al extremo o el delantero.

¿Cómo defender en una 4-3-3?

El 4-3-3 desarrolla su faceta defensiva a partir del trivote en el centro del campo, con independencia de si lo forman jugadores ofensivos o defensivos. Con un 4-3-3 puedes elegir una presión alta –imagen 1– en la que el trivote se sume al tridente ofensivo, buscando ahogar al rival de mediocampo hacia adelante, o una presión en campo propio –imagen 2– en la que liberarás a los tres atacantes de labores defensivas y en la que esperarás al rival en tu centro del campo. La primera te permite ahogar al rival, recuperar en campo ajeno y lanzarte a la contra, aunque a costa de un mayor cansancio de los jugadores y quedarte expuesto en caso de que tu rival supere la presión.

Nos gusta en El Rincon De Chava respetar las posiciones naturales en cada una de las tácticas, sin embargo tratamos aquí una modificación que consiste en emplear la 4-3-3 con dos MCO ocupando las posiciones MC-MC con un MCD a sus espaldas.

Se trata de una apuesta muy ofensiva que puede generar problemas en defensa. Y es que los MC no sólo se encargan de construir,sino que son los encargados de dar la cobertura y apoyo a las bandas para no sufrir situaciones de 2vs1 en los laterales. Son muchos los jugadores de Ultimate Team que eligen esta opción simplemente por colocar en posiciones de MC a un MCO con mucha velocidad. Se trata de un error.Esta opción no debe buscarse con el único ánimo de correr. Apuesta por un MCO creativo, que te permita tener el balón, con buenas estadísticas en conceptos como Pase Corto, Pase Largo, Regate, Control, Visión… Es una opción que únicamente recomendamos si quieres un juego de mucha posesión, vistoso, de mucho pase al hueco y creativo desde la medular.

Una de dudas que suelen asaltar cuando se juega con extremos es cómo desarrollar su juego. ¿Mantenerlos pegados a la cal o emplear sus virtudes en vertiginosas y rápidas diagonales hacia el área? Debes decidirlo no sólo en virtud de tu estilo de juego sino de las características propias de tu extremo. Para que juegue en diagonales al área deberán destacar entre sus virtudes conceptos propios de un rematador, como la Definición, Voleas, Posicionamiento, Potencia de Tiro…

Junto a las virtudes de tu extremo, vigila las virtudes de tu delantero centro. Si juegas con un ‘9’ estático y rematador, la opción básica será que los extremos se peguen a banda y surtan de balones -imagen 1- al delantero centro. Si tu delantero centro tiene condiciones para desenvolverse como ‘falso 9’ -imagen 2- entonces puedes aprovechar su movilidad para generar espacios -imagen 3- que aprovechen los extremos.

¿Laterales o carrileros?

Debes parate a pensar qué quieres de tus laterales en la 4-3-3 una vez conozcas el estilo de juego de tus extremos. Podemos optar por carrileros, siempre y cuando nuestros extremos se sumen al área. Serán entonces los laterales los encargados de ocupar la zona junto a la línea de cal. Si los extremos permanecerán pegados a banda, vigila su implicación ofensiva, pues pueden molestarse con los extremos y ser perjudicial.

Instrucciones de Jugador, tipos de jugador y Táctica Personalizada para un Juego Vertical

Os presentamos una táctica pensada para un juego vertical -que no significa lo mismo que directo- desde los centrocampistas con continuidad de jugada través de los extremos en pase al hueco y diagonales hacia el área.

Dos centrales

Básicos. Al ser una formación con cuatro defensores no requieren de características especiales, como en una defensa de tres.

Dos laterales

Al tratarse de una formación con extremos, su presencia en ataque se reduce como punto de partida. Aún así, les buscaremos como recurso. Porque ello Ataque Equilibrado y Avance. Si queremos una actitud mucho más ofensiva, aún a riesgo de descuidar la espalda, Unirse al ataque, aunque con los extremos pueden llegar a molestarse. En defensa, Intercepciones Conservadoras.

MCD

Sus instrucciones de juego básicas serán Defensa Equilibrada, Quedarse atrás al atacar, Intercepciones Normales y Marcaje del centro. Al ser una formación con cuatro defensas y tres jugadores en el centro del campo, no necesitas un MCD rápido o veloz, sino un buen defensor, robusto y de buenos valores en defensa.

MC-MC

El doble MC-MC que flanquea al MCD tiene, por igual, la obligación de construir y destruir. Como punto de partida apostamos por Ataque Equilibrado, Esperar Rechace, Intercepciones Normales, Libertad de Movimientos y Marcaje de las bandas. Queremos unos MC capaces de moverse con libertad por el centro del campo y en la frontal, donde les usaremos como recurso para filtrar pases al hueco y disparos. Opta por dos MC técnicos de buen pase corto, pase largo, visión o agilidad.

ED-EI

En esta táctica usaremos a los extremos como atacantes puros. Por ello Apoyo defensivo básico, Tirar diagonales, Desmarcarse y Entrar al remate. Queremos dos ED-EI que complementen al DC como jugadores de regate y remate en el área. Nuestra apuesta ofensiva no serán los centros al área en este caso como primera opción.

Dado que apostamos por extremos ‘goleadores’, nuestro DC deberá sumarse al trío atacante. Te damos dos opciones. Opción A con Quedarse en el centro y Desmarcarse, en la que sumamos al DC a esa movilidad en ataque. Opción B con Quedarse en el centro y Referencia en la buscamos que el DC fije y atraiga a los defensores rivales, generando espacios que puedan emplear los extremos.

Como punto de partida de esta 4-3-3 apostaremos por un estilo ofensivo equilibrado. Ya hemos dicho que queremos un estilo de juego vertical pero no directo, lo cual implicaría un estilo de juego jugadores balones largos.

Queremos una formación amplia para aprovechar a los extremos y abrir espacios desde la banda –Anchura 8 o 9 de 10– y como los centros no serán la apuesta primordial en nuestro estilo de juego, Jugadores en el área 3 de 10– para buscar importancia a los MC y sus disparos desde fuera del área.

De inicio vamos a apostar un estilo defensivo Equilibrado buscando situarnos en el centro del campo. Para que funcione mejor Profundidad 5 de 10 y dado que no tenemos MD-MI y los extremos pueden quedarse arriba enganchados, Anchura 7 de 10 para facilitar las ayudas y coberturas de banda de los MC.

Instrucciones de Jugador, tipos de jugador y Táctica Personalizada para un Posesión

La 4-3-3, gracias la presencia de dos MC, nos permite poder desarrollar un estilo de juego en posesión y no tan vertical como el que recomendamos inicialmente. En este caso recomendamos algunos ajustes, empezando por el Estilo Ofensivo. Se puede mantener en Equilibrado pero recomendamos pasarlo a Posesión así como una Anchura 8 de 10. Puedes cambiar -según tus gustos- la función de los MC de Libertad de movimientos por Conservar la posición, pero sobre todo recomendamos cambiar en los ED-EI a Quedarse en banda y Remate y Rechace. Nuestros extremos dejarán de ser goleadores para pasar a ser centradores y pasadores como primera función, valores que deberás priorizar entre sus cualidades. El DC, en función de sus cualidades, puedes mantenerlo en Quedarse en el centro y Desmarcarse.

En los últimos años una de las últimas tendencias ha sido la ausencia de delantero puro sobre el césped, el famoso ‘falso 9’, una modalidad puesta en práctica en su máxima expresión por el Barcelona de Guardiola y Messi, figura esta última clave en el desarrollo de una formación donde el ‘falso 9’ se multiplica en una múltiple función. Ocupando una posición de segundo delantero sobre el campo, ejercerá tanto como mediocentro ofensivo, colaborando en la generación del juego en tres cuartos del cesped, como delantero en posiciones de remate, o como jugador de segunda línea gracias a que su movilidad y posicionamiento deja espacios que deberán aprovechar los extremos.

Así pues la movilidad y la libertad de movimientos es la característica principal en el 4-3-3 con falso ‘9’, donde la táctica deberá dirigirse hacia la posesión, el juego de ataque, los pases al hueco y las diagonales de los extremos hacia el área aprovechando los espacios que deja la ausencia de delantero, el cual será eje en las últimas decisiones del ataque.

Más allá de consideraciones tácticas defensivas -similares a otros 4-3-3 clásicos- la táctica personalizada recomendada:

Velocidad: 40/ Pases: 40/ Posición: Organizada

Pases: 67 / Centros: 30/ Tiros: 60/ Posición: Libre

Recuerda que es muy conveniente que los extremos jueguen buscando siempre el área más que la banda… Con ello los laterales pueden ser una gran herramienta de ataque.

Se trata de una de las formaciones más ofensivas y desequilibradas al mismo tiempo. Hablamos de la 4-2-4, en ocasiones evolución natural de la 4-4-2 cuando los minutos de partido pasan y la falta de energía impide el retorno de los jugadores. En otras ocasiones, decisión técnica cuando el marcador obliga a volcarse al ataque sin importar las consecuencias. Se trata de una formación en la que rompemos el equipo en dos partes, los 6 que defienden y los 4 que atacan. Inclusive, y si sumamos a los laterales al ataque, 6 atacan y 4 defienden. Es una táctica que desde El Rincón del Chava sólo recomendamos para el tramo final de un partido con la obligación de remontar.

Como punto de partida una defensa en línea con dos laterales sobre los que deberemos tomar la decisión de sumar al ataque o mantener una actitud equilibrada. En la medular dos MCD, dos mediocentros muy defensivos sin labor ofensiva. En la zona de ataque dos extremos (EI-ED) y dos delanteros (DC) sin obligaciones defensivas. Queremos que se queden arriba.

Como decíamos anteriormente, queremos que los extremos y delantero queden arriba, en el balcón del área. A partir de ahí tú decides. Los extremos pueden tener la misión de ejecutar sus movimientos hacia la diagonal del área en busca de disparo y la asociación del delantero, sumando además efectivos al área. Por contra puedes elegir extremos al uso, alcanzando la línea de fondo para buscar el centro. En cualquier caso, en el área dos DC referencia absoluta.

A riesgo de desproteger la defensa, si hemos escogidos que nuestros extremos hagan diagonales al área, los laterales –imagen 2– se sumarán al ataque para poner centros al área.

Se trata de un dibujo en el que resulta conveniente acabar la jugada porque el vacío que se genera en tres cuartos del campo puede resultar complicado contrarrestar.

Instrucciones de Jugador, tipos de jugador y Táctica Personalizada

DFC. En ningún caso se sumarán al ataque. Incluso podemos escoger ‘Intercepciones Agresivas’ buscando cortar cualquier atisbo de ataque rival en inferioridad numérica.
LTD-LTI. Queremos que nuestros extremos se sumen al área rival, por lo que nuestros laterales serán los que pongan los centros. Para ello elegiremos ‘Unirse al ataque’ y ‘Avance’.
MCD-MCD. ‘Quedarse atrás al atacar’, ‘Esperar al rechace’, ‘Intercepciones agresivas’, ‘Conservar la posición’ y ‘Marcaje de las bandas’. A ser posible esta táctica requiere un centro del campo físico. Dado que se buscarán las transiciones rápidas y el juego directo, no necesitamos un centro del campo técnico.
ED-EI. ‘Quedarse arriba’, ‘Tirar diagonales’, ‘Desmarcarse’, ‘Entrar al remate’ e ‘Intercepciones agresivas’. Queremos extremos en labores de delanteros, que se unan al área a los dos DC. Diagonal y disparo.
DC-DC. Quedarse en el centro, Referencia, Intercepciones agresivas y Quedarse arriba.

No queremos la posesión, sino atacar directo. Por ello el estilo ofensivo será Balones Largos hacia los ED,EI y ambos DC. Apostaremos por un equipo ancho –Anchura 9 de 10– para atacar desde fuera hacia adentro. Dado que hemos escogido como modo de juego las diagonales de los extremos y los DC como referencia, apostaremos todo a los centros al área –Jugadores en el área 10 de 10– por parte de los laterales, a los que habremos ordenado subir.

En Córners 3 de 5 y Faltas 3 de 5.

Como estilo defensivo, Presion Fuerte. Dado que hemos escogido que nuestros jugadores hagan entradas agresivas o que los cuatro de arriba no bajen, subiremos lineas con una Profundidad 9 e incluso 10 de 10– y para controlar el riesgo del ataque por bandas, Anchura 8 de 10 para que nuestros centrales caigan en cobertura.

Entre lo defensivo y lo ofensivo. Así se podría hablar de la 4-3-1-2, una táctica muy a la ‘italiana’ con la que gestionar la pelota desde el centro del campo -eje de todo el sistema- olvidando por momentos las bandas, un elemento secundario. El juego pivota sobre el armazón de un trivote -defensivo u ofensivo- que da la cobertura necesaria a una zona de ataque donde el MCO es el engranaje de una doble pareja de delanteros incuestionable. Un sistema que ejemplifica a la perfección el Milan 2002-2003 de Carlo Ancelotti, campeón de Champions con un sistema que en el centro del campo aglutinaba un trivote formado por Gattuso, Pirlo y Seedorf (estos dos últimos con libertad para sumarse al ataque), Rui Costa liberado en la mediapunta y Shevchenko e Inzaghi como delanteros. Podría confundirse con un 4-1-2-1-2, en rombo cerrado, pero tiene sus diferencias.

Por delante de una línea defensiva de cuatro, la primera elección debe ser el tipo de trivote que se busca. No es lo mismo formar con un MCD escoltado de MDI y MDD, que un MCD con MVI y MVD. La primera opción, defensiva, obliga a jugar bien a la contra o a una velocidad más lenta. En el segundo de los casos las opciones ofensivas y la velocidad se incrementan en la zona de creación. Los mediovolantes deberán ser los encargados de sumarse tanto al ataque como a la defensa, llegando hasta línea de tres cuartos cuando se tenga la pelota. Lo recomendable es la presencia de laterales de largo recorrido, que serán los encargados de ocupar las bandas y, llegado el caso, de colgar balones al área. Ocasionalmente pueden ocupar esta zona los MVI y MVD, pero ello generará un desgaste contraproducente. En la mediapunta el MCO será el protagonista. Será el encargado de entrar desde la segunda línea. Será el encargado de realizar el último pase al hueco al delantero, disparar desde la frontal o ingresar en el área como si de un tercer delantero se tratara. Por tanto, para usar esta táctica deberás tener un MCO con destacadas cualidades ofensivas y un mediocampo potente.

¿Qué tipo de centro del campo escogemos?

Cuando decides escoger como formación la 4-3-1-2 (o 4-1-2-1-2, rombo cerrado) debes hacerlo teniendo en cuenta que el cuarteto de centrocampistas son la clave del sistema. Buen ejemplo supone la Juventus 2013-14 con un centro del campo configurado por Pirlo, Marchisio, Pogba y Vidal, cuatro jugadores que combinaban a la perfección técnica y pase con despliegue físico, llegada y remate.

Cabe decir que no existe un centro del campo estandar para este tipo de formación, existen tantas combinaciones como jugadores mezcles en el cuarteto. Eso sí, ten siempre clara una cosa, no tiene sentido recurrir a esta formación y situar los MD y MI como MC. Si quieres jugar con jugadores de banda, usa el rombo abierto tradicional.

El 4-3-1-2 está conformado por cuatro centrocampistas puros, colocados en el centro del campo con el objeto de dominarlo y convertirlo en el eje de todo lo que pase. Bien con MC o con MCD, el objeto básico es reunir cuatro jugadores donde se combine lo defensivo, lo físico y lo técnico. Dada la presencia de cuatro centrocampistas, no es necesario que el MCD sea físicamente poderoso siempre y cuando se le arrope de dos MC que permitan apoyar sus carencias defensivas. En este caso ese MCD buscaremos que sea técnicamente el protagonista, como pasaba con Pirlo, escoltado por dos jugadores con despliegue como Vidal y Pogba.

Como decíamos, son los propios jugadores los que harán de tu 4-3-1-2 un equipo ofensivo o defensivo. Buen ejemplo de un 4-3-1-2 defensivo es el PSG 2014-2015 con Motta como MCD puro y escoltado por Matuidi y Verrati, dos jugadores de corte mucho más defensivo, táctico y físico que ofensivo. En este caso el peso de las operaciones deberá recaer sobre el MCO, que puede ser un mediapunta creador subordinado a los delantero o un mediapunta que ejerza de segundo delantero. Con esta apuesta en mejor jugar a la contra y sobre los tres jugadores de la zona alta.

Puedes aportar mucha táctica, creación y capacidad ofensiva situando jugadores propios de posiciones de mediapunta en la zona de centro del campo. Ganarás regate, tiro y pase pero deberás ser consciente de que perderás capacidad defensiva, agresividad y táctica. Buen ejemplo, un centro del campo formado en el Real Madrid 14-15 con Kroos, Modric, James e Isco.

Y en esa apuesta por el 4-3-1-2 ofensivo, un paso más es situar no sólo jugadores MCO en posiciones de centro del campo, sino a un delantero en la posición del vértice superior del rombo. Buen ejemplo, con el Barcelona 14-15, serían Busquets, Iniesta, Rakitic y Messi en el vértice del ataque.

Táctica personalizada (fuerte defensa y jugar con posesión de balón):

Velocidad: 45/ Pases: 45/ Posición: Organizada

Pases: 60/ Centros: 35/ Tiros: 70/ Posición: Libre

Presión: 50/ Agresividad: 72/ Anchura: 50/ Cubrir

Aprovechando la presencia del trivote jugaremos con una defensa fuerte y agresiva ejerciéndola desde el centro del campo – Presión 50 – para recuperar la pelota y comenzar a moverla en corto – Pases 45 – para llevarla a zona de tres cuartos, donde mandará el MCO. Dado que es una táctica sin interiores optaremos por acabar las jugadas bien con disparos desde la frontal – Tiros 70 – o con un último pase al hueco – Pases 60 -. En este caso buscamos la libertad de movimientos en zona de ataque, de modo que los delanteros podrían caer a bandas.

Táctica personalizada (Presión arriba y jugar a la contra):

Velocidad: 75/ Pases: 60/ Posición: Organizada

Pases: 70/ Centros: 35/ Tiros: 45/ Posición: Organizada

Presión: 69/ Agresividad: 72/ Anchura: 45/ Cubrir

En el caso de buscar el juego a la contra, el objetivo será recuperar el balón lo más pronto posible – Presión 69 – y armar el ataque con velocidad – Velocidad 75 – buscando bien un pase largo o un pase al hueco a los dos delanteros esperando la definición en el área.

Táctica personalizada (Juego de elaboración, centros al área y fuerte presión defensiva):

Velocidad: 47/ Pases: 41/ Posición: Organizada

Pases: 67/ Centros: 70/ Tiros: 45/ Posición: Organizada

Presión: 69/ Agresividad: 60/ Anchura: 45/ Cubrir

En este caso la apuesta es radicalmente distinta. De inicio se busca la posesión de la pelota y la generación del juego a través de pases en corto –41– y creación pausada –47-. Con esa velocidad pensaremos en la incorporación de los laterales como una posibilidad real en ataque. Fruto de ello pensaremos en la opción de los centro al área –70– como una opción preferencial junto con los pases al hueco –67– desde el MCO a los delanteros. A la hora de defender, y pensado en nuestro trivote, emplearemos una presión adelantada –69– con notables apoyos –60-.

Sólida en defensa – se llega a defender con 10 jugadores – y plomiza en ataque, de toque tranquilo, avance paso a paso, toque, mucho centrocampismo y dominio de balón. Son algunos de los aspectos que pueden verse en la 4-1-4-1, una táctica muy polifacética que de inicio resulta complicada aplicar para jugar a la contra, aunque se puede.

La Alemania de Joaquim Löw o la España de Luis Aragonés, entre otros ejemplos, la usaron para dar salida a todos sus jugones en el centro del campo. El resultado, dominio de balón y mucho juego de toque defendiendo desde la posesión del balón. Versión ofensiva. La defensiva se pudo ver de la mano de Mourinho en la final de Copa del Rey ante el Barsa de Guardiola. Un Real Madrid fuertemente replegado -incluido Cristiano-, sin posesión de balón, con Pepe -central- en el centro del campo y lanzado a la contra a partir de la recuperación.

Las principales variantes que puede ofrecer la 4-1-4-1 parten de la selección de jugadores que formarán la línea de cuatro en el centro del campo. Como base, una defensa básica de cuatro -dos centrales y dos laterales- con un MCD un paso por delante. Dada la acumulación de jugadores en el centro del campo, no es preciso que entre sus características domine el físico o lo defensivo. Comodín para las ayudas en defensa, y ‘escoba’ en las recuperaciones en faceta ofensiva, su faceta creadora puede ser especialmente aprovechable.

Las variantes arrancan en la línea de cuatro centrocampistas, donde podemos recurrir a una configuración clásica –MI, MVI, MVD, MD– en la que situemos jugadores propios de cada posición o una más alternativa donde incorporemos MCO o MC en las posiciones de MI y MD, acumulando cuatro centrocampistas puros. Inclusive puedes arriesgar con una línea de cuatro MCO en la que sería conveniente, esta vez sí, cerrar con un MCD más defensivo.

La forma en que queramos afrontar el ataque determinará nuestra concepcion del 4-1-4-1. Si queremos cerrarnos en defensa y atacar desde la contra -imagen 3- elegiremos un DC rápido que permita aprovechar los lanzamientos en largo y pases al hueco. Podemos ayudarle con los MVI y MVD acudiendo como ayuda desde la segunda línea a la espalda del delantero. Otra opción de ataque es el clásico desarrollo del juego -imagen 1- desde las bandas a través de los MI y MD. Un juego muy similar al que se realizará con un 4-4-2, aunque con un único DC aguardando el pase.

Sin embargo el 4-1-4-1 nos permite poner en práctica un juego diferente a través de la posesión y el dominio del balón. En este caso -imagen 2- dejamos las bandas en manos de los laterales y convertirmos la línea de cuatro centrocampistas en los protagonistas. Serán los que muevan el balón desde la segunda línea, actuando todos ellos por dentro. Toque y toque bien hasta encontrar el pase al hueco al DC o descargando a banda, donde el lateral colgará el balón. En estos casos nuestro ‘9’ no tiene porqué tener en la velocidad su mejor virtud, sino en el remate. La que tenga debe meterla.

No olvides que dispones de una importante segunda línea que puedes aprovechar en lanzamientos desde fuera del área.

Una de las cuestiones que debes manejar con inteligencia en el 4-1-4-1 es la defensa. Se trata de una formación desde la que sacar provecho a la eliminación de espacios al rival en el centro del campo. Si no quieres parapetarte en tu campo deberás optar por una Agresividad elevada, subiendo líneas en bloque. Una de las opciones más recomendables -imagen 2- es elevar al máximo tu línea de presión, llevándola al campo contrario, aprovechando incluso a tu delantero. Con lleva un peligro, deja espacios a la espalda y con ello las contras, así como el desgaste físico de tu equipo.

Presión: 80/ Agresividad: 70 / Anchura: 66 / Cubrir (o Fuera de juego, al gusto)

Otra de las opciones -imagen 2- es optar por una solución intermedia, llevando la presión al centro del campo, esperando al rival en la medular.

Presión: 57/ Agresividad: 67/ Anchura: 66 / Cubrir

Por último, y para los más conservadores, está -imagen 3- esperar en campo propio, donde el MCD queda casi como un tercer central. En este caso el delantero intervendrá menos en las operaciones defensivas. También se rebaja la presión -en este caso los jugadores deben aguantar la posición y no salir demasiado al rival- y al recuperar lo propio es optar por un balón en largo al DC. Demasiados metros te aguardan hasta la portería rival.

Presión: 39 / Agresividad: 49/ Anchura: 70/ Cubrir

Como ya se decía anteriormente, la 4-1-4-1 permite jugar con un juego directo o con posesión y dominio del balón. En este caso el peso del juego recae por dentro en los cuatro centrocampistas, dejando las bandas a los laterales. El juego se genera por dentro para, entre las distintas opciones, poder finalizar por fuera a través del lateral y un centro al área. Un lateral que sea un buen centrador y maneje conceptos de pase corto y largo es una ventaja por encima de la velocidad.

Táctica básica personalizada recomendada para el 4-1-4-1:

Velocidad: 42/ Pases: 50 / Posición: Organizada

Pases: 50/ Centros: 70 / Tiros: 52/ Posición: Organizada

Presión: 57 / Agresividad: 70 / Anchura: 66 / Cubrir

Una apuesta por el fútbol vertical, sin pausa y plenamente ofensivo. Así podemos considerar la 4-3-2-1, una formación cuya característica principal es la presencia de tres delanteros. Apuesta atacante, renuncia a las bandas puras y un centro del campo formado por tres centrocampistas por donde pasará la responsabilidad de lanzar el ataque. Una formación para buscar la pegada por encima de la posesión y el toque, lo cual hace perder valor a la presencia de 3 delanteros.

Puedes ver un buen ejemplo de 4-3-2-1 en La Pizarra de… Didier Deschamps

La 4-3-2-1 se apoya sobre una línea defensiva básica compuesta por los LTD-LTI en bandas y la pareja DFC-DFC en el centro. La propuesta basica en el centro del campo parte en FIFA de un trivote formado por MC-MC-MC. En El Rincón de Chava os proponemos colocar un MCD en el lugar del MC centrado. La zona de ataque estará formada por un DC arropado por dos segunos delanteros –SDD y SDI– puros o por dos jugadores de ataque -extremos o delanteros- colocados en la posición de segundos delanteros.

En la 4-3-2-1 buscaremos situaciones de superioridad en la frontal. Desmarques de los SDI-DC-SDD, pases al hueco a la espalda de los centrales y los laterales, búsqueda de 1Vs1 en el lateral del área y a partir de ahí centro o disparo. Es la fórmula básica de ataque. Hablamos de verticalidad, regate y disparo. Es clave –imagen superior– aprovechar los espacios entre los centrales y laterales o entre los propios centrales para proyectar la jugada.

Con tres delanteros lo natural es afrontar el juego desde la verticalidad -no desde balones largos- y la rapidez en la transición. Combinación rápida entre los MC y salida de la jugada hacia el ataque. Con la orden de desmarque para los SDI-DC-SDD, buscaremos la espalda de los laterales y centrales rivales con el pase filtrado. Buscamos mucha movilidad en los SDD-SDI hacia la frontal y el lateral del área, no hacia los extremos y la línea de fondo. Importante diferencia.

En un juego tan directo, y sin extremos sobre el césped, cabe preguntarse por el valor y protagonistas en la banda. Lo normal –imagen 1– será usar nuestros laterales como carrileros, a riesgo de dejar nuestras espaldas desprotegidas. Otra de las opciones –imagen 2– es que sean los MC los encargados de bascular a banda. Será posible siempre y cuando les demos libertad de movimientos y su físico les permita ocupar espacios sobre el terreno de juego. La opción que recomendamos en El Rincón de Chava es que la incorporación de los laterales –imagen 3– sea equilibrada y escalonada.

El delantero es una de las figuras claves en todas las formaciones y no podía serlo menos en la 4-3-2-1, donde la frontal de ataque está formada nada menos que por tres, aunque dos de ellos ejerzan como SDI y SDD. El DC, que ocupa la parcela central del ataque, es una pieza clave en el entramado ofensivo. La 4-3-2-1 requiere de un DC clásico, puro, fuerte, potente, de trabajo Alto en ataque, capaz de aguantar a los defensas, fijarlos y crear los espacios para los SDI y SDD. Pero también un rematador oportunista.

No importan la velocidad o la capacidad de regate, rasgos más indicados para los SDI y SDD. Apuesta por un DC con atributos elevados como Salto, Precisión de Cabeza, Definición o Posicionamiento.

Instrucciones de Jugador, tipos de jugador y Táctica Personalizada para un Juego Vertical

Os presentamos una táctica pensada para un juego vertical -que no significa lo mismo que directo- desde los centrocampistas con continuidadcon pase al hueco hacia los SDI-DC-SDD

Dos centrales

Básicos. Al ser una formación con cuatro defensores no requieren de características especiales.

Dos laterales

Al tratarse de una formación con SDD-SDI, su presencia en ataque se reduce como obligación, aunque serán un recurso. Porque ello Ataque Equilibrado y Avance. Si queremos una actitud mucho más ofensiva, aún a riesgo de descuidar la espalda, Unirse al ataque, aunque con los SDD-SDI pueden llegar a molestarse. En defensa, Intercepciones Conservadoras.

MC central

Sus instrucciones de juego básicas serán Defensa Equilibrada, Quedarse atrás al atacar, Intercepciones Normales, Esperar Rechace y Marcaje del centro. Aunque la posición que nos pide FIFA es MC, podemos colocar en la misma un MCD con el objetivo de gnar en equilibrio defensivo.

MC-MC

Los MC-MC que flanquean al MC central tienen, por igual, la obligación de construir y destruir. Como punto de partida apostamos por Ataque Equilibrado, Esperar Rechace, Intercepciones Normales y Marcaje de las bandas. Elegiremos Libertad de Movimientos si queremos que los centrocampistas sean protagonistas en el ataque y ocupen más espacios en el terreno de juego. Elegiremos Conservar la posición -recomendable- si buscamos su influencia desde la medular y el pase directo a la zona de ataque.

SDD-SDI

En esta táctica usaremos daremos mucha importancia a los segundos delanteros. Por ello Desmarcarse y Abrirse a las bandas será la opción prioritaria. También es válido Desmarque y Quedarse en el centro.

Como ya hemos dicho antes, buscamos un DC que ocupe la parcela central pero que sea capaz de aprovechar el juego en vertical. Por ello Quedarse en el centro y Desmarcarse.

Como punto de partida de esta 4-3-2-1 apostaremos por un estilo ofensivo equilibrado. Ya hemos dicho que queremos un estilo de juego vertical pero no directo.

Queremos cierta amplitud en ataque –Anchura 7 de 10– y como tenemos tres delanteros sobre el campo, Jugadores en el área 5 de 10–.

De inicio vamos a apostar un estilo defensivo Equilibrado buscando situarnos en el centro del campo. Para que funcione mejor Profundidad 6 o 7 de 10 y dado que no tenemos MD-MI y los extremos pueden quedarse arriba enganchados, Anchura 7 de 10 para facilitar las ayudas y coberturas de banda de los MC.

Llamada por algunos como la formación del ‘árbol de navidad‘ por la distribución de los jugadores y conocida antiguamente como 4-3-2-1, encontramos la 4-5-1. Se trata de una formación donde los protagonistas son los dos MCO. Se puede considerar una versión ofensiva de la 4-1-4-1, una formación pensada para jugar en posesión en campo rival, llegada desde segunda línea, desmarques al espacio y golpeo desde la frontal.

La 4-5-1 arranca desde una defensa en línea de cuatro defensores en la que el trabajo en ataque de los LTD-LTI no es obligatoria. La presencia de MD-MI permiten una ocupación posicional de las bandas. El eje central de esta formación lo ocupa un único MC. Es uno de los principales problemas y debilidades de este sistema. Necesitarás un MC con marcado carácter defensivo. Aún así, uno de los problemas de esta formación es que habitualmente perderá la posición. Deberás vigilar mucho las pérdidas de pelota en ataque. Pueden ser el inicio de un fatídico contragolpe. Puedes optar por situar en la posición del MC un MCD.Para que el equipo esté más equilibrado será clave la labor defensiva tanto de los laterales como de los volantes. La zona de ataque estará formada en su eje central por el DC arropado por dos MCO, que serán los que lleven la manija del juego, la posesión y la finalización de la jugada.

Instrucciones de Jugador, tipos de jugador y Táctica Personalizada

La táctica personalizada que hemos creado es para un juego de posesión, de movilidad ofensiva y buscando que el equipo en defensa se posicione en el centro del campo.

DFC. Instrucciones de jugador por defecto.
LTD-LTI. Queremos que nuestros laterales se sumen al ataque aunque de manera paulatina. Por ello ‘Ataque equilibrado’ y ‘Avance’, mientras que en defensa ‘Intercepciones Conservadoras’ para no perde la posición.
MC. ‘Quedarse atrás al atacar’, ‘Esperar rechace’, ‘Intercepciones Normales’ y ‘Marcaje del centro’ serán las instrucciones para nuestro MC. No queremos un mediocentro que se sume al ataque. Su prioridad es la defensa. Opta por un MC defensivo en el que primen valores como la resistencia, intercepciones, robo de balón o entrada agresiva.
MCO-MCO. En defensa ‘Bajar a defender’, pues queremos que den equilibrio en el centro del campo en defensa, formando una especiel de 4-1-4-1. En ataque ‘Libertad de movimientos’ y ‘Rechace y remate’. Puedes escoger también ‘Entrar al remate’. No necesitamos mediapuntas especialmente rápidos, pues queremos jugar al toque y posesión. Prioriza Visión, Pase Corto, Posicionamiento e incluso Disparo Lejano, muy útil para sorprender desde la frontal
MD-MI. Como en el resto de posiciones, ‘Bajar a defender’. En ataque queremos que den amplitud al juego, por lo que ‘Quedarse en banda’ y ‘Desmarcarse’. Nos ayudarán a dar salida al juego por el exterior.
DC. Como punto de partida ‘Desmarcarse’ y ‘Vía de ataque equilibrada’ pues buscamos el toque, el pase al hueco y el espacio. Buscamos delanteros hábiles en el desmarque, combinativos y ágiles. Como segunda opción podemos elegir ‘Quedarse en el centro’ y ‘Referencia’. El DC pedirá el balón, abrirá espacios a los MCO. En este caso debemos buscar un DC más corpulento, físico, de remate en zona del ‘9’.

En Córners 3 de 5 y Faltas 3 de 5.

Hemos dicho con anterioridad que queremos que el equipo se instale en defensa en el centro del campo. Por ello el estilo defensivo será Equilibrado con una Anchura 5 de 10 y una Profundidad 5 o 6 de 10.

No son las formaciones con cinco defensas habituales en la actualidad, aunque lo cierto es que aún se pueden encontrar equipos que tienen a utilizarlas. La seguridad que suelen conceder gracias a sus cinco defensores -tres centrales y dos laterales- son un buen punto de partida para construir un equipo sólido no sólo en defensa, sino en ataque. Buen ejemplo es la 5-2-1-2, una formación consistente en defensa pero que en ataque se organiza en torno al MCO. A diferencia de la 5-2-2-1, la 5-2-1-2 invita a masticar la jugada en ataque desde la posesión.

La 5-2-1-2 se sostiene sobre cinco defensores y dos mediocentros puros. La presencia de un MCO por delante crea un triangulo en el centro del campo donde se genera la jugada. Y todo ello con la aportación de los carrileros. Porque en este caso carrileros se sumarán al ataque, convirtiendo esta formación en faceta ofensiva en una 3-4-1-2 muy interesante para pasar a un juego de toque y pase.

La 5-2-1-2 nos permite evolucionar el equipo de faceta defensiva -imagen 1- a faceta ofensiva a través del balón, la posesión y la combinación entre jugadores. Un cambio de actitud defensa-ataque donde el equipo -imagen 2- hace avanzar la jugada de forma progresiva bien de mano de los laterales, que se irán incorporando al centro del campo hasta conformar una especie de 3-4-1-2, bien de la mano de los dos mediocentros, que harán de la línea de centro del campo su punto de llegada y partida. Y en medio de ello, el mediocentro ofensivo. El MCO será el pivote sobre el que gire -imagen 3- el juego ofensivo en tres cuartos del campo. Será el punto de partida de la última fase de la jugada. Se apoyará en los mediocentros, en los laterales y en los delanteros para generar espacios y situaciones de superioridad dos contra uno. A partir de su salida de balón, la decisión. Podrá abrir la jugada a los laterales para acabar con un centro al área, podrá filtrar el balón a los DC o podrá aprovechar los espacios que generen para entrar a portería desde segunda línea.

Centrales. Aunque se trata de una táctica con cinco defensores, lo cierto es que por el carácter ofensivo que buscamos darla, lo mejor es abordar el puesto de central como si de una táctica de tres defensores se tratara. Busca así al menos que los dos DFC exteriores tengan una velocidad que supere los 65.
Carrileros. Queremos jugadores rápidos, que se sumen al ataque como extremos pero que recuperen en faceta defensiva. Capacidad de trabajo Alto/Alto.
MC. Queremos posesión y toque. Un ‘5’ clásico, de toque y destrucción, puede ser muy útil
MCO. Pasador
DC. Dos delanteros centros. Puede ser interesante complementar un delantero rápido con otro más estático y rematador.

Táctica personalizada:

Velocidad: 50/ Pases: 55/ Posición: Organizada

Pases: 70/ Centros: 55/ Tiros: 35/ Posición: Organizada

Presión: 39/ Agresividad: 65/ Anchura: 40/ Cubrir

La táctica está diseñada para jugar desde la posesión -velocidad 50 y pases 55- aunque con cierta velocidad, a partir de la cual el MCO encontrará mayores facilidades para buscar el pase al hueco -70- o desde los laterales buscar los centros -55-. Dados los cinco defensores, no se necesita un equipo ancho.

Podemos optar porque el equipo suba las líneas de presión para presionar arriba subiendo el valor de Presión de 39 a 80 y bajando la Agresividad de 66 a 40.

Habitualmente las formaciones son ofensivas y defensivas en función de los jugadores, su actitud o el estilo de juego, sin embargo hay formaciones que ayudan a ciertos estilos y en este caso estamos ante ello. Si bien es cierto que jugar con 5 defensas no tiene por qué implicar un juego defensivo, la 5-2-2-1 o 5-2-3 tiene más de defensivo que ofensivo. Porque es una formación que invita a partir el equipo en dos, parapetarse atrás y lanzar el juego en largo hacia los tres de arriba.

La 5-2-2-1 se sostiene sobre un pilar defensivo de siete jugadores -los cinco defensores y los dos mediocentros- mientras que la faceta ofensiva recaerá, fundamentalmente, en los tres de arriba (ED-DC-EI). Y dado que es una formación con extremos hay que valorar cuál queremos que sea el papel de los carrileros en ataque (muy al contrario de la 5-3-2 donde los carrileros ejercen de extremos en fase ofensiva).

De inicio el 5-2-2-1 no es una formación que se preste a la posesión y sí al juego directo aprovechando la presencia de tres jugadores de ataque, la ausencia de un MCO que sirva de enganche, pero sobre todo la distancia que existen entre el bloque defensivo y el bloque ofensivo, lo que incrementa la tendencia al juego directo superando así la distancia entre líneas -zona azul- mediante pases al hueco a zonas de desmarque -zona blanca- y balones en largo a los extremos, encargados bien de acabar la jugada con un remate o con un centro al DC.

Centrales. Protegidos por carrileros, no es necesario que sean DFC rápidos. Pon en valor cualidades como el juego por alto e incluso la capacidad de pase.
Carrileros. Si deseas que se incorporen al ataque, por en valor su velocidad. Si no se van a incorporar al ataque, mejor contundentes defensivamente.
MC. Es una de las posiciones en las que debes pararte a pensar para qué quieres esta alineación. Si deseas parapetarte en defensa, dos MC físicos y de despliegue. Si deseas tener posesión y avanzar poco a poco, con cinco defensas por detrás apuesta por dos MC con buenos números en el pase.

Táctica personalizada (defender en campo propio y jugar a la contra):

Velocidad: 75/ Pases: 75/ Posición: Organizada

Pases: 70/ Centros: 55/ Tiros: 30/ Posición: Libre

Presión: 39/ Agresividad: 50/ Anchura: 40/ Cubrir

La táctica está diseñada para jugar en largo y rápido -velocidad 75 y pases 75- y desde esa misma rapidez buscamos los pases al hueco -70- y pocos tiros -no hay segunda línea-. En defensa, aguantar en campo propio -presión 39- pero bastante agresividad. No es necesario hacer el equipo ancho. Hay cinco defensas y solo dos centrocampistas que no pueden estar basculando a banda.

No penséis en el 5-3-2 como una formación únicamente defensiva, aunque por la disposición de sus jugadores pueda llevar a ello. Como formación con 5 defensas y 3 centrocampistas puede ser ideal para aquellos que piensan más en la defensa que en el ataque y encuentran en la contra el mejor camino al gol. Su uso solía ser habitual entre equipos que, dada su debilidad táctica y física, optaban por esperar a su rival en campo propio para salir a la contra. Solían, en pasado.

La 5-3-2 se puede vislumbrar, como ocurre en el presente, desde una perspectiva más ofensiva, más dinámica, desarrollada desde la capacidad de combinar el juego directo con la posesión, confeccionada sobre largos carrileros y el dominio en el centro del campo. Posiblemente pocos recuerdan ya al Real Madrid que levantó ‘La Octava’ Champions con cinco defensores como Salgado, Roberto Carlos, Karanka, Iván Campo y Helguera como líbero.

La 5-3-2 se estructura en un bloque compacto en el que predomina la solidez gracias a sus posiciones básicas de partida. Sus cinco defensores, con tres centrales, son el germen de la misma, si bien en dos piezas de la misma arranca la posibilidad de dar un mayor sentido ofensivo a la misma. Hablamos de los laterales (LTD-LTI), o mejor dicho carrileros (CAD – CAI). Ante la ausencia de volantes en banda su mayor o menor predisposición al ataque les convierte en un camino al gol.

En el centro del campo es innegociable un trivote con un MCD como eje y dos interiores (MC-MC) en sus costados que en función de sus características -más ofensivas o defensivas- ejercerán labores de construcción o destrucción. Todo ello para concluir con dos delanteros (DC) a los que les corresponde la tarea del gol.

Ya sea con carrileros ofensivos -imagen 1- o defensivos -imagen 2- la presión defensiva de partida en el 5-3-2 invita inicialmente a ejercerla en campo propio y cerca de las inmediaciones de nuestro área. En el primero de los casos los carrileros formarán más cerca de los centrocampistas que de los centrales, en el segundo la línea de cinco será clara. A partir de la recuperación de balón los metros y distancia hasta posiciones ofensivas determinan el estilo de juego, directo hacia los delanteros o en posesión y más lento avanzando líneas.

Hemos definido la 5-3-2 como un sólido bloque. Un bloque defensivo al que podemos hacer avanzar líneas –imagen 3– hasta el centro del campo. Los centrales empujarán desde atrás, aún a riesgo de desproteger sus espaldas. Se unirán a los centrocampistas y carrileros en el centro del campo, generando una presión alta y buscando la recuperación en las proximidades de la medular. Agresividad, intensidad, presión y físico definirán esta alternativa.

En El Rincón de Chava nos gusta apostar por el 5-3-2 como una formación ofensiva capaz de convertirse en ataque en una 3-5-2. Para ello puede usarse el cambio de actitud del equipo durante un partido, de la ‘equilibrada’ por defecto a la ‘ofensiva’ o ‘ultraofensiva’ con la que subir líneas.

Sin embargo no es la única vía para convertir la 5-3-2 en una formación ofensiva. La primera decisión parte de la actitud de nuestros carrileros. Jugadores de trabajo Alto/Alto, capaces de unirse a las jugadas de ataque, con buena capacidad de centros. La segunda decisión, los MC. Jugadores de buen pase en corto y largo, de conducción ágil capaz de alcanzar inmediaciones del área. Visión de pase o disparo una vez alcanzadas las inmediaciones del área.

Táctica Personaliza Básica

elrincondechava.wordpress.com

Velocidad: 49/ Pases: 50/ Posición: Organizada
Pases: 40/ Centros: 64/ Tiros: 46/ Posición: Organizada
Presión: 66/ Agresividad: 52/ Anchura: 66/ Cubrir

Táctica personalizada básica, sobre la que hacer evolucionar el equipo. Velocidad de ataque moderada buscando la posesión, con una faceta ofensiva basada en centros al área –64-. Elevaremos o disminuiremos el valor Pases y Tiros en función del estilo de juego que buscamos y en especial de las características de nuestros MC. En el aspecto defensivo fijamos la atención en el centro del campo como lugar de presión. Comenzamos con una Presión de 66 pero podemos elevarlo hasta 80.

Carrileros: Ataque Equilibrado
MC central: Quedarse atrás al atacar/ Esperar rechace/ Conservar la posición
MC izquierdo y derecho: Ataque Equilibrado / Remate y Rechace/ Libertad de movimientos
DC: Desmarcarse
DC: Referencia / Quedarse en el centro

En el caso de los carrileros podemos optar por ‘Sumarse al Ataque’, mientras que optamos porque uno de los DC se desmarque. Podemos optar porque ambos sean ‘Referencia’

Táctica personalizada (para robar en campo contrario y jugar a la contra):

Velocidad: 75/ Pases: 60/ Posición: Organizada

Pases: 70/ Centros: 45/ Tiros: 70/ Posición: Libre

Presión: 90/ Agresividad: 60 / Anchura: 68/ Cubrir

El objetivo es adelantar las líneas de presión -90- a campo contrario, recuperar y lanzar rápido el ataque -Velocidad 75- en largo -60- y directo -Pases 70- al marco contrario.

Táctica personalizada (para defender en campo propio y atacar con posesión:

Velocidad: 45/ Pases: 41 / Posición: Organizada

Pases: 55/ Centros: 60/ Tiros: 55/ Posición: Organizada

Presión: 39 / Agresividad: 60/ Anchura: 68/ Cubrir

Esta táctica personalizada busca esperar en campo propio -Presion 39- con ayudas de los compañeros -Agresividad 55- a la búsqueda de un robo que genererá un ataque en posesión -Velocidad 45- y pases cortos -41- si arriesgar -55- con la opción de la llegada del carrilero para poner el centro al área -60-.

Táctica personalizada (defender en campo propio y jugar a la contra):

Velocidad: 80/ Pases: 75/ Posición: Organizada

Pases: 70/ Centros: 45/ Tiros: 70/ Posición: Libre

Presión: 39/ Agresividad: 60/ Anchura: 68/ Cubrir

Táctica personalizada recomendada:

Velocidad: 47 / Pases: 49 / Posición: Organizada

Pases: 50/ Centros: 66 / Tiros: 65/ Posición: Organizada

Presión: 57 / Agresividad: 50 / Anchura: 66 / Cubrir

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