Toni Kroos, el ‘francotirador’ del Bayern

Internacional absoluto con Alemania, Toni Kroos se ha convertido en unas de las piezas claves en el centro del campo de un Bayern de Münich en el que ha sabido hacerse un ción, explotando sus mejores virtudes, el disparo lejano, la capacidad de trabajo y una disciplina táctica que le permite ocupar cualquiera de las posiciones en una medular donde sabe cómo complementar al pivote defensivo.

Aprovechando en su momento la baja forma de Müller -ahora pletórico- Kroos supo ganar la partida en la zona de tres cuartos del conjunto bávaro, mostrando y consolidando unas virtudes que le perfilan como uno de los mejores centrocampistas de la Selección Alemana. Fue la pasada temporada cuando empezó a despuntar sus cualidades como un centrocampista especialmente completo en todas las facetas, pero que se desenvolvía con precisión en la frontal. Entonces (2011-2012) con Luiz Gustavo haciendo tareas defensivas y Schweinsteiger llevando los mandos de las operaciones, tanto en la destrucción como en la creación, Kross se desveló como el complemento perfecto. La llegada de Javi Martínez, que relegó a Luiz Gustavo al banquillo, no fue un impedimento a su crecimiento.

Con la llegada de Guardiola, Müller en plena forma, y la incorporación de dos centrocampistas ofensivos como Götze y Thiago Alcantara, dos perfiles de jugadores que se adaptan, y mucho, a la idea de fútbol del entrenador catalán, lo cierto es que Toni Kroos ha seguido dando pasos hacia adelante pese a alternar el banquillo con una titularidad que en otros equipos sería indiscutible. No son pocos los primeras espadas que empiezan a mirar a Kross en una temporada en la que Gundogan se encuentra en dique seco por culpa de una de esas lesiones -espalda- que tanto rechazo generan entre quienes deseaban hacerse con los servicios del turco-alemán.

Aunque más ofensivo que defensivo, lo cierto es que Kroos sigue la estela de los centrocampistas todoterreno. Aunque su físico no sea su nota predominante, su táctica y capacidad de sacrificio ofrece al equipo un equilibro especialmente atractivo cuando se trata de jugar con doble pivote o con tres jugadores en el centro del campo, siendo en este caso un interesante sistema para un jugador que se descuelga a la zona de disparo con facilidad, que dispone de un gran último pase y cuyos desplazamientos en largo son de lo mejor.

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